D.
Cesar Franco, obispo de Segovia, aseguró durante la homilía que los cristianos
deben participar en la vida pública con “caridad política”
La Doctrina Social de la Iglesia ha acuñado en
los últimos tiempos el término 'caridad política' como la respuesta a un Dios
que se ha revelado en la historia como atento a las circunstancias concretas en
que viven las personas. Este término fue empleado ayer por el obispo de Segovia
César Franco para resaltar la importancia del compromiso de los católicos hacia
la participación en la vida pública ante los representantes de los movimientos
y asociaciones seglares de la diócesis que se dieron cita en el Santuario de
Nuestra Señora de la Fuencisla para celebrar la eucaristía del Año Jubilar de
su Coronación; que llenaron el templo dedicado a la patrona de Segovia.
En su homilía, monseñor Franco fue muy preciso
a la hora de advertir a la 'infantería de la diócesis' sobre la necesidad de
incrementar su presencia en todos los ámbitos sociales, económicos, políticos y
culturales de su entorno. Así, aseguró que "ningún campo de la sociedad
debe quedar al margen de la presencia de los cristianos", y aunque
reconoció que "es difícil cambiar la sociedad no nos podemos cruzar de
brazos ni nos podemos quejar porque todos somos responsables de la situación
actual".
Además, indicó que la Iglesia "debe
iluminar con su presencia todos los campos, desde un punto de vista de caridad
política y siempre con el horizonte de buscar el bien común".
El obispo realizó una breve digresión sobre el
momento político actual, marcado por las elecciones del 26 de junio, y aseguró
citando al papa Francisco que la Iglesia "tiene que meterse en la gran
política, concebida como servicio al bien común y no en la maquinaria cerrada
de los partidos", y aseguró que a los cristianos "tiene que
preocuparnos que vengan políticos que tengan en cuenta el bien común y la
dignidad de las personas".
Por otra parte, pidió a los movimientos y
asociaciones de la diócesis que su tarea esté "urgida por la
caridad", de manera que se dirija a los alejados "y no a miraros el
ombligo pensando que sois los mejores".
Así, señaló que el apostolado seglar
"tiene como misión la santificación de sus miembros, que unidos con los
sacerdotes y el obispo salgan a la calle para dar a conocer el Evangelio",
y preguntó si en el momento actual "nos interesa que se hable de la fe y
de la gracia a los jóvenes o vivimos como obreros ociosos".
Tras la eucaristía, los distintos
representantes de los movimientos y asociaciones seglares compartieron en la
alameda de La Fuencisla un refresco con la aportación de todos los
participantes.
Artículo extraído del Adelantado de Segovia