Amaya
Azcona, directora general de la Fundación REDMADRE, señaló
que “el Estado sigue dedicando cuantiosos recursos económicos a financiar el
aborto y no a ayudar a la maternidad”
El Ministerio de Sanidad Español publicó el
pasado 30 de diciembre que durante el año 2015 se realizaron 94.188
abortos en un total de 200 centros en todo el país.
Los datos publicados muestran que en el año
2015 se practicaron 608 abortos menos que en el año anterior y es la cifra más
baja de los últimos diez años, pero hay que tener en cuenta también la
disminución del número de mujeres entre 20 y 40 años.
Las cifras de abortos correspondientes al
año 2015 son las primeras desde que entró en vigor la mínima reforma que
realizó el gobierno de Mariano Rajoy por el que las menores necesitan el
consentimiento paterno para abortar.
371 menores de 15 años abortaron durante el
año 2015, 9.461 de entre 15 y 19 años y unas 60.000 mujeres de entre 20 y 34
años.
Según apunta Servimedia, de los 94.188
abortos, el 89% se realizaron a petición de la mujer, mayoritariamente de
nacionalidad española (69%). El 80% de ellos se llevaron a cabo en centros
privados y el 69% estaban embarazadas de ocho o menos semanas.
23.391 mujeres que abortaron durante el año
2015 ya lo habían hecho anteriormente al menos una vez, 7.743 en dos ocasiones,
2.567 en tres ocasiones, 970 cuatro veces y 718 habían abortado antes en cinco
o más embarazos.
Amaya Azcona, directora general de la Fundación
REDMADRE, subrayó que “el Gobierno debe hacer frente al drama
del aborto con políticas que promuevan el valor
de la maternidad y con leyes de apoyo a la mujer embarazada”.
Además señaló que “sorprende que en un país
donde se producen más muertes que nacimientos y en el que cada año hay un
déficit de 250.000 niños para asegurar el sostenimiento de la población, el
Estado siga dedicando cuantiosos recursos económicos a financiar el aborto y no
a ayudar a la maternidad”.
Azcona insistió en que desde su fundación
de apoyo a la maternidad tienen la experiencia de que “ninguna mujer quiere
abortar. Son sus circunstancias las que la abocan a ello y cuando recibe la
ayuda que necesita continúa adelante con su embarazo. Por eso, resulta
bochornoso que uno de cada cinco embarazos acabe en aborto provocado. Muchas
mujeres no abortarían si tuvieran los medios necesarios para llevar a cabo su
maternidad”.
Alicia Latorre, presidenta de la Federación
Española de Asociaciones Provida, indicó a Europa Press que las
cifras reales son superiores ya que “no todos los abortos se declaran”.
Latorre ha calificado los datos de “abominables”
y de “una masacre consentida y financiada por el Estado” y ha valorado el
esfuerzo de los voluntarios sin cuyo trabajo “este número de abortos habría
podido ser mucho mayor”.
Gádor Joya, portavoz de la plataforma Derecho
a Vivir, calificó como “vergüenza” que el gobierno publicara
las cifras sobre el número de abortos en 2015 “en el último minuto laborable
del año” lo que, según afirma, “demuestra una clara intención de que estas
cifras pasen desapercibidas”.
“Todo esto nos hace estar escandalizados y
avergonzados por el Gobierno que tenemos, en connivencia con el resto de
partidos, que parece que han hecho un pacto de silencio para no tratar este
tema”.
“Una vez más, tenemos que ser los españoles
los que sigamos manteniendo el tema del debate del aborto vivo para en un
futuro poder conseguir que algún gobierno se decida a bajar drásticamente esas
cifras”, declaró a EP Joya.
Fuente:
ACI Prensa