El Papa afirmó que “es
triste ver que esta tierra entra en una esterilidad vocacional sin encontrar
remedios eficaces”
El Papa Francisco se dirige a los Obispos italianos. Foto: Daniel Ibáñez / ACI Prensa |
El
Papa Francisco lamentó la crisis vocacional que padece la Iglesia y la comparó
con una “hemorragia” ocasionada por la cultura del relativismo y los
escándalos.
En
un discurso ante la Conferencia Episcopal Italiana con motivo de la apertura de
su Asamblea General, que tuvo lugar este lunes 21 de mayo en el Aula Nueva del
Sínodo, en el Vaticano, el Santo Padre señaló que la crisis de vocaciones, la
pobreza evangélica y la reducción y fusión de Diócesis son sus tres principales
preocupaciones respecto a la Iglesia en Italia.
El
Pontífice comenzó su discurso de apertura recordando que en el peregrinar de la
Iglesia, “no estamos solos: nos acompaña María como Madre”. A continuación,
detalló las tres preocupaciones que tiene respecto a la situación de la Iglesia
en Italia.
Crisis de vocaciones
“Me
preocupa la crisis de vocaciones”, señaló Francisco. “Nos jugamos nuestra
paternidad y es una hemorragia”. Esta crisis de las vocaciones “es un fruto
envenenado de la cultura de lo provisional, del dinero y del relativismo, junto
con los escándalos, el testimonio tibio y el invierno demográfico”.
El
Papa afirmó que “es triste ver que esta tierra entra en una esterilidad
vocacional sin encontrar remedios eficaces”.
Para
hacer frente a esta crisis vocacional, Francisco propuso una mayor colaboración
entre Diócesis, incluso enviando misioneros de unas a otras para ayudar a las
que tienen más problemas relacionados con el secularismo: “Propongo una
colaboración fidei donum más estrecha entre las Diócesis italianas”.
Pobreza evangélica y
transparencia
El
Papa afirmó que la pobreza evangélica “es madre y muro de la vida apostólica”,
se trata de algo que “aprendí como jesuita”. La pobreza evangélica “hace nacer
y protege” la vida apostólica”. “Quien tiene fe no puede hablar de pobreza y
vivir al mismo tiempo como un faraón. Es un ‘anti-testimonio’. Es escandaloso
gestionar los bienes de la Iglesia como si fuesen personales”.
Por
el contrario, “debemos gestionar con ejemplaridad, con reglas claras aquello
por lo que un día rendiremos cuentas. Soy consciente y reconozco que en la
Conferencia Episcopal Italiana se ha hecho mucho en los últimos años, pero
todavía se debe hacer más”.
Reducción y fusión de
Diócesis
La
reducción y fusión de Diócesis “no es fácil. Creo que hay Diócesis que se
pueden fusionar. Lo he comentado ya en el año 2013. Se trata de una exigencia
pastoral, estudiada muchas veces, ya, por primera vez, en 1929. Pablo VI, en
1964, habló del excesivo número de Diócesis”.
“Estas
son mis preocupaciones”, concluyó el Papa Francisco. “Son puntos para
reflexionar”.
Fuente:
ACI Prensa