6.9.18

EL PAPA: INDUSTRIA DE LA DIVERSIÓN, VIAJES, CRUCEROS, NO DAN DESCANSO VERDADERO

Audiencia General del miércoles, el Pontífice reflexionó sobre el tercer mandamiento: “Fíjate en el sábado para santificarlo”

Antoine Mekary | ALETEIA | I.MEDIA
“Se debe distinguir entre el verdadero descanso y la evasión, tan común en nuestros días. Hoy se intenta evadir la realidad buscando una diversión que oculte nuestro descontento”, afirmó el papa Francisco durante la Audiencia General del miércoles 5 de septiembre de 2018 en la Plaza de San Pedro. 

El Papa invitó a ver el descanso como un día de contemplación y bendición. El domingo es día del recuerdo de los otros días de la semana y hacer las paces con la vida. “¡Cuánta gente que tiene la posibilidad de divertirse y no tiene paz en la vida!”, sostuvo Francisco. “La vida es preciosa; no es fácil, y a veces es dolorosa, pero es preciosa”.

La bendición y la alegría requieren una apertura al bien que es un movimiento adulto del corazón. El bien es amoroso y no se impone jamás. Es una elección. 

Por este motivo, la paz se elige, no se impone y no se encuentra por casualidad. Así, el Papa instó a que el hombre haga las paces con lo que lo obliga a escapar.  “Es necesario reconciliarse con la propia historia, con los hechos que no se aceptan, con las partes difíciles de la propia existencia”.

No es cuestión de hedonismo, sino de saborear las pequeñas cosas.  Por ello, indicó que hay personas humildes y pobres que nos enseñan el valor de la alegría porque aprecian una “pequeña gracia” con una “felicidad que sabría de eternidad”. 

La industria de la distracción

“La sociedad actual tiene sed de entretenimiento y vacaciones. La industria de la distracción es muy floreciente y la publicidad muestra el mundo ideal como un gran parque de juegos donde todos se divierten”, advirtió. 

El Papa que no sale de vacaciones del Vaticano, sino que dedica ese tiempo a leer y meditar, al mismo tiempo que reduce los compromisos de trabajo, expresó que “descansar realmente no es fácil, porque hay un descanso falso y un verdadero descanso. ¿Cómo reconocerlos?”, cuestionó.

“El concepto de vida dominante en la actualidad no tiene el centro de gravedad en la actividad y en el compromiso, sino en la evasión”. 

Ganar dinero para divertirse, satisfacerse. “El modelo de imagen es el de una persona exitosa que puede permitirse espacios de placer amplios y diferentes. Pero esta mentalidad se desliza hacia la insatisfacción de una existencia anestesiada de entretenimiento que no es descanso, sino alienación y escape de la realidad”. 

“El hombre – continuó – nunca ha descansado tanto como hoy, ¡sin embargo, el hombre nunca ha experimentado tanto vacío como hoy!”. 

“Las posibilidades de divertirse son tantas: viajes, cruceros, pero no dan la plenitud del corazón. Por el contrario, no te dan el reposo”, abundó en la predicación en idioma italiano. 

El sentido del reposo auténtico 

En la predicación insistió “en el sentido del reposo auténtico” que se encuentra en las palabras del Éxodo: “Dios hizo el mundo en seis días, y el séptimo descansó”. Y señaló: “Ese descanso es la alegría de Dios por su creación, que era muy buena”. 

Francisco invitó a los cristianos a dar gracias a Dios, en su día, el domingo, y en “la eucaristía”, que significa “dar gracias”, “se encuentra el culmen de esa jornada de contemplación y bendición, en la que acogemos la realidad y alabamos al Señor por el don de la vida”. 

Dar gracias a Dios “por su misericordia y por todos los bienes que nos concede” en la semana que ha pasado. 

“Yo les pregunto: ¿Cada uno de ustedes se ha reconciliado con la propia historia? La verdadera paz, de hecho, no es cambiar la propia historia, sino acogerla y valorizarla”.

El descanso momento propicio para la reconciliación

“El reposo es también un momento propicio para la reconciliación, para confrontarnos con las dificultades sin escapar de ellas, para encontrar la paz y la serenidad de quien sabe valorizar lo bueno que tiene, incluso en el lecho del dolor o en la pobreza”, sostuvo. 

Al final el Papa saludó a los peregrinos presentes en la Plaza de San Pedro. Así, los animó “a abrir el corazón a la Providencia divina y a descubrir la profunda verdad del Salmo: «Solo en Dios descansa mi alma»”.  

La audiencia general, concluyó con el canto del Padre Nuestro en latín y la Bendición Apostólica.

Ary Waldir Ramos Díaz

Fuente: Aleteia

¡SÍGUENOS EN NUESTRAS REDES SOCIALES! 
facebook twitter