El diálogo debe continuar, llevando adelante lo iniciado
![]() |
| Papa Francisco recibiendo a la delegación ecuménica de la Iglesia Luterana de Finlandia en el Vaticano |
Ayer por la mañana al recibir a la
delegación ecuménica de la Iglesia Luterana de Finlandia con motivo de su
peregrinación anual en Roma, el Papa Francisco les aseguró que el ecumenismo es
un viaje irreversible.
“El
compromiso común con el ecumenismo es un requisito esencial de la fe que
profesamos, un requisito que proviene de nuestra propia identidad como
discípulos de Jesús. Y como discípulos, al seguir al mismo Señor, entendemos
cada vez más que el ecumenismo es un viaje, un viaje que, como han subrayado
los diversos Pontífices del Concilio Vaticano II, es irreversible. La unidad
entre nosotros crece en este camino”, dijo el Papa en su discurso este 19 de
enero por la fiesta de San Henrik, el santo patrono de Finlandia.
“Cuando
oramos juntos, cuando juntos proclamamos el Evangelio y servimos a los pobres y
necesitados nos encontramos en el camino y el viaje en sí progresa hacia la
meta de la unidad visible”, añadió el Pontífice.
Asimismo, afirmó que inclusive “las cuestiones
teológicas y eclesiológicas que aún nos alejan se
resolverán solo durante este viaje común, sin forzar nuestra mano y sin prever
cómo y cuándo ocurrirá esto. Pero podemos estar seguros de que, si somos
dóciles, el Espíritu Santo nos guiará en formas que ni siquiera podemos
imaginar hoy”.
Por
otro lado, el Pontífice advirtió que se debe “hacer todo lo posible para
alentar la reunión y resolver los malentendidos, hostilidades y prejuicios de
caridad que han arruinado nuestras relaciones durante siglos”.
“El diálogo debe continuar, llevando adelante lo iniciado. No
estamos solos en el camino. Hay testigos comunes que, como San Henrik, nos
preceden en nuestro viaje. Por lo tanto, es verdad que la Tradición no es
un dilema, sino un regalo”, continuó el Obispo de Roma.
Según
el Papa, “la tradición no es algo que nos permite distinguirnos, sino una
entrega que nos ha sido encomendada para enriquecernos mutuamente”; esto se
debe a que “siempre
estamos llamados a regresar a la consigna originaria, desde donde fluye el río
de la Tradición: es la costilla abierta de Cristo en la cruz”.
“Todos
los años los cristianos en el mundo se dan una cita especial para pedirle
al Señor una mayor unidad. Uno no puede trabajar solo por la justicia: la
justicia para todos se pide y se busca juntos. En un mundo desgarrado por
la guerra, el odio, el nacionalismo y la división, la oración común y el
compromiso por una mayor justicia no se posponen. Estas son omisiones que
no podemos permitirnos. Confío en que nuestro testimonio común de oración
y fe dará frutos y que su visita reforzará la ya sólida colaboración entre
luteranos, ortodoxos y católicos en Finlandia”, concluyó el Papa.
Fuente:
ACI Prensa






