Un
joven cristiano de 23 años, cuyo cuerpo fue hallado este 7 de agosto entre los
escombros con una cruz en su mano, se ha convertido en el símbolo de la
tragedia ocurrida en Beirut (Líbano), conmoviendo en las redes sociales
![]() |
Su
nombre es Joe Elias Akiki y trabajaba en el puerto de Beirut para pagar sus
estudios de Ingeniería Eléctrica en la Universidad de Notre Dame – Louaize del
Líbano, centro católico donde se formaba desde 2016.
El
cuerpo de Joe fue encontrado este 7 de agosto por los rescatistas que trabajan
arduamente en los escombros de la zona portuaria libanesa. El joven tenía una
pequeña cruz en la mano.
“Atrapado
durante tres días bajo el edificio derrumbado, Joe Akiki estuvo orando todo el
tiempo sosteniendo la cruz en su mano, murió rezando, murió silenciosamente”,
expresó en su cuenta de Twitter la columnista Christiane Waked.
“Con
gran pesar la NDU se despide de Joe Elias Akiki”, señaló por su parte la
universidad en su cuenta de Twitter, y envió “sus más sinceras condolencias a
su familia y seres queridos”. “Que su alma descanse en paz eterna”, añadió en
el post que acompaña con una cita de Santa Teresa de Lisieux: “No estoy
muriendo, estoy entrando en la vida”.
La
zona portuaria de Beirut fue destruida el 4 de agosto por dos explosiones, una
de las cuales alcanzó un radio de nueve kilómetros, arrasando con edificios,
viviendas, y afectando también iglesias, mezquitas y hospitales, los cuales, ya
saturados por la pandemia del coronavirus, atienden a los heridos.
Según
las informaciones, hasta el momento se han contabilizado más de 150 muertos y
más de cinco mil heridos. El ministro de Salud, Hamad Hassan, dijo que entre
los heridos, 120 están en condición crítica.
Además,
el gobernador de Beirut, Marwan Abboud, dijo que los daños se calculan entre
tres mil y cinco mil millones de dólares, y que al menos hay 300 mil personas
damnificadas, “incapaces de dormir en sus hogares”.
Con
el fin de ayudar en la atención de las víctimas, el Papa Francisco realizó una
donación de 250.000 euros a la Iglesia en el Líbano.
El
Dicasterio para el Servicio del Desarrollo Humano Integral afirmó que “en estos
momentos de dificultad y sufrimiento”, esta ayuda “quiere ser un signo de la atención
y cercanía de Su Santidad hacia la población afectada y de su cercanía paternal
a las personas que se encuentran en graves dificultades”.
Fuente:
ACI Prensa






