La catedral de Santiago, testigo del lanzamiento de la peregrinación a la que está convocada la juventud de Europa
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| Foto: Archidiócesis de Compostela |
El arzobispo de Santiago, monseñor Julián Barrio, presidió
el acto principal del lanzamiento de la Peregrinación
Europea de Jóvenes (PEJ), que se desarrollará del 3 al 7 de agosto de 2022.
Fue el pasado sábado, 7 de agosto, ante más de un centenar de voluntarios que
trabajan en la preparación. «Os traigo el saludo afectuoso del Papa», les dijo,
y expresó su deseo de que «Dios quiera que un día como hoy» el Papa Francisco «os pueda
saludar personalmente» en la ciudad del Apóstol.
La cita, aplazada un año a causa de la pandemia, congregará en
Santiago a miles de jóvenes de toda Europa. Para ello, aseguró monseñor Barrio,
la archidiócesis compostelana es un espacio de acogida a la que llegarán en
busca de la verdadera meta, que es «la libertad del corazón a la que Dios nos
llama» desde la tumba del Apóstol. El arzobispo aseguró que «la celebración de
la PEJ será una gracia de Dios» para que todos los jóvenes puedan manifestar su
esperanza en Cristo y «su fidelidad y amistad con Él».
«Mucho tiempo para hacer bien las cosas»
El acto de lanzamiento de la PEJ fue moderado por Raúl
Tinajero, director del departamento de Juventud de la Conferencia Episcopal
Española, y contó también con la presencia del vicepresidente de la Xunta,
Alfonso Rueda; del alcalde de Santiago, Xosé A. Sánchez Bugallo; y del obispo
auxiliar de Valencia, monseñor Arturo Pablo Ros, presidente de la subcomisión
episcopal de Juventud e Infancia de la Conferencia Episcopal Española. Rueda
indicó que «queda mucho tiempo para hacer bien las cosas» y ofreció la
colaboración de la Xunta. Asimismo, recordó las raíces cristianas del Camino de
Santiago, además de indicar que «esperamos otras alegrías para el año que
viene», en alusión a una posible visita del Papa Francisco.
El alcalde Burgallo, por su parte, aseguró que «la ciudad
está feliz de recibir a los jóvenes», que son «nuestro futuro y nuestra
esperanza», y tuvo un recuerdo para la visita de san Juan Pablo II en la JMJ de
Santiago del año 1989, «un momento imborrable», aseguró. Asimismo, monseñor Ros
destacó la labor de los voluntarios, a los que pidió: «No dejéis de buscar a
Jesús». El voluntariado «es caridad», dijo, y añadió que la amabilidad, la
cercanía y la sonrisa de los voluntarios son un signo de la cercanía de Cristo.
Al final del encuentro, el cantante gallego Rubén de Lis
interpretó el himno oficial de la PEJ, y posteriormente, voluntarios e
invitados participaron en la Eucaristía que presidió Barrio en la Catedral
compostelana. La jornada continuó por la tarde con reuniones de trabajo y
encuentros formativos del voluntariado, concierto y diversas actividades en el
Seminario Menor de Belvís.
Fuente: Revista Ecclesia
