La “vida eucarística entre los fieles es fundamental para la vida de la comunidad”, es llevar “a Cristo a las comunidades”
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| Imagen referencial. Crédito: Unsplash |
Cerca del 52° Congreso Eucarístico
Internacional que se celebrará en Budapest (Hungría), la Fundación Pontificia
Ayuda a la Iglesia Necesitada (ACN) lamentó que en muchos países haya falta de
medios o de libertad, pero señaló que en Occidente lo que falta muchas veces es
la fe.
Del 5 al 12 de septiembre se celebrará una nueva
edición del congreso eucarístico que contará con la presencia del Papa
Francisco, siendo la primera vez en 21 años que un pontífice asiste al
encuentro.
En un comunicado, ACN indicó que el congreso reunirá a
católicos de todo el mundo para “profundizar sobre la importancia de la
eucaristía y reflexionar sobre la misión de la Iglesia católica para hacer
presente el amor de Dios en el mundo actual”.
La directora de proyectos para ACN, Regina Lynch,
señaló que “el objetivo de este encuentro es dar a conocer y fomentar el amor a
la eucaristía, misterio sagrado de nuestra fe”.
“Pensamos que este congreso es profético en tiempo de
pandemia. Puede ser muy importante para la vida de la Iglesia, ya que la
COVID-19 ha dificultado en muchos sitios la asistencia a la Santa Misa y las
devociones eucarísticas”, agregó.
Además, indicó que este evento resaltará que la “vida
eucarística entre los fieles es fundamental para la vida de la comunidad”, es
llevar “a Cristo a las comunidades”.
“En muchos países los fieles tienen verdadero anhelo
por recibir la Eucaristía y sentir su presencia y se enfrentan con otros los
problemas: la falta de libertad religiosa, la inseguridad por conflictos
civiles y militares, las largas distancias unidas a la falta de transporte, y
también la pobreza, las comunidades carecen de fondos para construir una casa
de culto o incluso para mantener a sus sacerdotes”, lamentó.
Frente a este panorama, ACN apoya proyectos para
permitir que la Eucaristía esté presente, cómo construir una capilla “en mitad
de una zona desértica o de las altas montañas” o regalar una moto “para que el
sacerdote pueda ir a celebrar la Misa a una misión alejada”.
“Las ayudas son muy variadas, desde algo muy práctico,
como puede ser una máquina de hostias, hasta algo más general y básico como la
formación de los futuros sacerdotes”, agregó la fundación.
Lynch indicó que si bien esas zonas padecen por la
falta “de medios o de libertad”, en Occidente se encuentra “muchas veces falta
de fe”.
“Demasiado estrés, falta de tiempo o desidia ante la
Eucaristía, por eso es muy importante rezar para que el congreso traiga una
renovación interior para Europa y Occidente”, agregó.
El Primado de Hungría, Cardenal Péter Erdő, resaltó
que “Dios nunca abandonará la humanidad” y señaló que el Señor está “con
nosotros a lo largo de la historia y nos está esperando para un feliz encuentro
eterno”.
“¡Qué podamos aprovechar las ocasiones de cada cita
con Él aquí en la tierra también! ¡Tenemos una cita con Cristo en Budapest, que
sea Él el compañero radiante de nuestras vidas, que sea Él quien nos traiga
optimismo y alegría a nuestras vidas!”, subrayó.
Durante el 52° Congreso Eucarístico Internacional se
contará por primera vez en 21 años con la presencia de un pontífice. El Papa
Francisco asistirá al encuentro y celebrará la Misa de clausura el 12 de septiembre.
El Cardenal Erdő señaló que la comunidad espera “la
llegada del Santo Padre con gran alegría y amor” y dijo que rezan “para que su
visita sea para nosotros un signo de esperanza y un nuevo comienzo a medida que
la situación de la epidemia disminuye”.
En el congreso se contará con los testimonios de
cardenales de países donde los cristianos viven su fe bajo grandes
dificultades, como el Patriarca caldeo de Irak, Cardenal Louis Raphael Sako; el
Arzobispo Emérito de Abuja y expresidente de la Conferencia Episcopal de
Nigeria, Cardenal John Onaiyekan; y el presidente de la Conferencia Episcopal
de Myanmar y Arzobispo de Yangon, Cardenal Charles Bo.
Finalmente, ACN animó a los fieles a encomendar los
frutos del congreso a Santa Elisabeth y San Esteban de Hungría, que en su vida
“revelan la importancia de la cercanía con Dios para llevar a cabo la misión
recibida”.
“Santa Elisabeth y San Esteban son así un buen ejemplo
para los húngaros y todos los cristianos del mundo a quienes podemos encomendar
los frutos del 52º Congreso Eucarístico Internacional y la renovación de la
devoción eucarística en Occidente”, concluyó.
Por Harumi Suzuki
Fuente: ACI Prensa
