El Papa Francisco presidió la Santa Misa este Domingo de Pascua, 17 de abril, para celebrar la Resurrección del Señor junto a miles de fieles reunidos en la Plaza de San Pedro
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Vatican News |
La Eucaristía comenzó con el
tradicional rito del “Resurrexit” en el que dos diáconos abrieron un antiguo
ícono que representa a Cristo y el Santo Padre rezó ante él y lo incensó.
Luego, el Santo Padre realizó el
rito de aspersión con agua bendita a los fieles.
Como es habitual en cada Domingo
de Resurrección, después de las lecturas se cantó la secuencia de Pascua, la
proclamación del Evangelio se cantó primero en latín y después en griego y el
Santo Padre no pronunció ninguna homilía y permaneció en silencio orante porque
después dirigirá su Mensaje de Pascua.
Después de su importante mensaje
pascual, el Papa impartirá la Bendición Urbi et Orbi desde el balcón
central de la fachada de la Basílica de San Pedro, la cual está adornada con
dos imágenes grandes: una de San Miguel Arcángel y otra de San José.
Oración en ucraniano
Tras las lecturas leídas en
español y francés, las oraciones de los fieles fueron pronunciadas en chino,
alemán, inglés, árabe y en ucraniano. En la plegaria en ucraniano se rezó al
“Padre de la gloria, que promete cielos nuevos y tierra nueva, para que conceda
a nuestros hermanos y hermanas difuntos participar a la Pascua eterna, con la
Virgen María y todos los santos”.
Al finalizar la Santa Misa en
latín se cantó el Regina Coeli.
Finalmente, el Papa Francisco
saludó personalmente a cada uno de los Cardenales presentes.
Emotivos saludos improvisados
Antes de recorrer con el
papamóvil la Plaza de San Pedro para bendecir a los numerosos fieles presentes
en la plaza y en la Vía de la Conciliación, ocurrieron unos emotivos saludos
improvisados.
Primero, un joven con síndrome de
down se acercó al papamóvil y subió para saludarlo, el Santo Padre habló
brevemente con él y le regaló un Rosario.
Luego, una mujer muy conmovida y
con dificultades para caminar se acercó llorando al Papa, le acercó a su hijo
adolescente enfermo, el Santo Padre los bendijo.
Vigilia Pascual
Previamente, el Sábado Santo por
la noche el Papa recordó en su homilía
de la Vigilia Pascual el drama de la guerra, cuyas noches “están
surcadas por luminosas estelas de muerte” y añadió que la luz de Dios “brilla
en las tinieblas del mundo”.
En esta línea, el Papa invitó “a
experimentar el encuentro con el Resucitado y a compartirlo con los demás; a correr
la piedra del sepulcro, donde con frecuencia hemos encerrado al Señor, para
difundir su alegría en el mundo”.
“Porque con Jesús, el Resucitado,
ninguna noche es infinita; y, aun en la oscuridad más densa, brilla la estrella
de la mañana”, advirtió.
El Santo Padre no presidió la
Vigilia Pascual. En su lugar, la celebró el decano del Colegio Cardenalicio, el
Cardenal Giovanni Battista Re.
Durante la Misa, además de
pronunciar su homilía, el Santo Padre bautizó a 7 adultos: cuatro de Italia,
uno de Cuba, una de Estados Unidos y una de Albania.
Por Mercedes de la Torre
Fuente: ACI Prensa