El Obispo de Córdoba (España), Mons. Demetrio Fernández, alentó a los fieles católicos a recurrir siempre al Espíritu Santo, “un abogado gratuito, que nos defiende en los peligros”
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| Vitral en la Basílica de San Pedro, en el Vaticano. Crédito: Dnalor 01 / Wikipedia (CC BY-SA 3.0 AT). |
Mons. Fernández dijo que el
“Espíritu Santo es el alma de la Iglesia, la persona divina que todo lo hace
nuevo. Por eso, es tiempo de clamar con profunda sed: “Ven Espíritu
santo”, llénanos con tu gracia, ilumínanos con tu luz y fortalécenos con tu
fuerza”.
El Obispo de Córdoba explicó que
Jesús nos habla este domingo “de una persona divina que enviará desde el seno
del Padre y que vendrá a morar en nuestros corazones”.
Lo definió Mons. Fernández como
“el abogado defensor que está a nuestro lado para defendernos a lo largo
de nuestra vida. Un abogado gratuito, que nos defiende en los peligros, rebate
a nuestros enemigos, que nos da conciencia de hijos de Dios”.
Nos invitó el
Prelado a dejarnos mover por el Espíritu Santo porque “en muchas ocasiones nos
mueven nuestros intereses, nuestro egoísmo. Sólo cuando nos mueve el Espíritu
Santo, nuestra vida adquiere valor redentor”.
El Obispo de Córdoba nos invitó a
escuchar “lo que el Espíritu dice en cada momento a su Iglesia y hoy, nos
invita el Papa Francisco a ponernos a la escucha de este mismo Espíritu Santo
para entender lo que dice a la Iglesia de nuestro tiempo.
Aseguró Mons. Fernández que nos
encontramos ante nuevos retos “para llevar a cabo la misión evangelizadora
de la Iglesia, la que Cristo nos ha confiado. Y se nos llama a vivir la
sinodalidad, la escucha del Espíritu que nos habla en la oración, en la Palabra
de Dios, en los sacramentos y a través de los hermanos”.
El Prelado alentó además a
enfrentar el desafío de evangelizar en un mundo pagano, “un mundo en el que
muchos se han apartado de la Iglesia en esa apostasía silenciosa, que padece
sobre todo nuestro continente europeo”.
“El Espíritu Santo es más potente
que todas las dificultades que nos rodean. Ven Espíritu santo, y
renuévanos”, concluyó el Obispo.
Puede leer la carta íntegra AQUÍ.
Por Marta Gómez
Fuente: ACI Prensa
