La Conferencia Episcopal Española (CEE) ofrece cinco pautas para la predicación desde los púlpitos en la Misa con motivo de la VI Jornada Mundial de los Pobres que se celebra el próximo domingo
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Imagen referencial. Crédito Ranyel Paula / Cathopic |
La Jornada Mundial de los Pobres fue instituida por el Papa Francisco
como resultado del cierre del Año
Jubilar de la Misericordia celebrado en 2016. Este año, el episcopado
español ofrece ayuda a los sacerdotes para preparar la homilía.
1. Tiempo para confiar y comprometerse
Al celebrar la Jornada Mundial de los Pobres bajo el lema
“Jesucristo se hizo pobre por vosotros”, la Iglesia invita a reflexionar sobre
nuestro estilo de vida y las diferentes pobrezas que existen.
Aunque vivamos tiempos de crisis “marcados por la guerra y la
subida de precios, que generan tanta incertidumbre y pobreza”, la CEE afirma
que no es momento “para el lamento, la nostalgia y el desaliento, sino para
confiar, esperar y comprometerse”.
2. La mirada puesta en Jesús
El episcopado español anima a “tener la mirada fija en Jesús” cuyo
mensaje, a través de “su vida y sus obras, nos muestra el camino para discernir
cuál es la pobreza que libera y cuál es la que esclaviza y roba vida”.
En este sentido, se subraya que la pobreza que mata es la “propia
de la lógica del descarte”. En contraposición, podemos vivir el desprendimiento
que libera, aquel que “nos aligera el paso y nos muestra que la sencillez y la
sobriedad generan vida y abundancia para quienes menos tienen”.
3. La hora del testimonio
Ante el panorama de la pobreza material y
espiritual, “se trata de dar una respuesta personal y comunitaria”. Y, como
dice el mensaje del Papa para esta jornada, “mientras más crece el sentido de
comunidad y de comunión como estilo de vida, mayormente se desarrolla la
solidaridad”.
Esta inercia se expresa como comunidad de vida y de bienes,
“compartiendo lo que tenemos con los que no tienen nada, pero acogiendo al
mismo tiempo, lo que nos puedan aportar: su trabajo, su pensamiento, su forma
de hacer y de entender la vida”.
También se invita a ser “comunidad de acción” porque “frente a los
pobres no se hace retórica”. Y, siguiendo las palabras del Papa Francisco, se
apunta a que “nadie puede sentirse exceptuado de la preocupación por los pobres
y la justicia social”.
Por último, se recuerda que el Mensaje del Papa para esta jornada
subraya que no se trata de desarrollar un comportamiento meramente “asistencialista”.
Más bien es momento de realizar una “atención sincera y generosa que permite
acercarse a un pobre como a un hermano”.
4. Perseverancia
La Conferencia Episcopal Española anima a los presbíteros a
dirigirse a los fieles con palabras de ánimo para perseverar y, así, “no
desviarnos del Evangelio”, buscar siempre el Reino de Dios y no “nuestros
pequeños intereses”, actuar desde el espíritu de Jesús y no el “instinto de
conservación” y buscar el bien de todos.
También se hace un llamamiento a, como miembros de la sociedad
civil, “cultivar y perseverar en valores como la libertad, la responsabilidad,
la fraternidad y la solidaridad”. Y, en cuanto discípulos, a “tejer el
fundamento de nuestro ser y nuestro actuar en la caridad, la fe y la esperanza”.
5. Partiendo el pan
En conclusión, los obispos españoles invitan a predicar sobre cómo compartir el pan y el vino de la fraternidad en el altar debería llevarnos a “seguir la pobreza de Jesucristo” como ha sugerido el Papa Francisco. Y, compartiendo la propia existencia, que “se libere a los pobres de la miseria y a los ricos de la vanidad”.
Por Nicolás de Cárdenas
Fuente: ACI Prensa