El Santo Padre,
abierta y vigorosamente, defiende la enseñanza de la Iglesia sobre la
anticoncepción, el aborto, la homosexualidad, las tecnologías
reproductivas, la educación de los niños y muchas otras más
El
Prefecto de la Congregación para el Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos en
el Vaticano, Cardenal Robert Sarah, afirmó que la ideología de género es
“demoniaca” y un “impulso mortal” que ataca a las familias.
Así
lo indicó el Purpurado africano en su intervención en el tradicional Desayuno
Nacional de Oración que se realizó en Washington D.C. en Estados Unidos, en el
que se reúnen diversos líderes del país para tratar diversos temas de gran
importancia.
En su ponencia, el Cardenal dijo que en ningún lugar
la persecución religiosa es “más clara que en la amenaza de las sociedades
contra las familias a través de la una demoniaca ideología de género, un
impulso mortal que se experimenta en un mundo que extirpa cada vez más a Dios a
través de la colonización ideológica” denunciada en
distintas ocasiones por el Papa Francisco.
El
Prefecto dijo luego que defender a la familia es una tarea fundamental en la sociedad de hoy:
“no es una guerra ideológica. Se trata en realidad de defendernos a nosotros
mismos, a nuestros hijos y a las generaciones futuras ante una ideología
demoniaca (la ideología de género) que dice que los niños no necesitan madres y
padres. Ella niega la naturaleza humana y quiere extirpar a Dios de
generaciones enteras”.
“La
ruptura de las relaciones fundamentales en la vida de la persona –a
través de la separación, el divorcio o las imposiciones distorsionadas de la
familia como la convivencia y las uniones del mismo sexo– es una herida
profunda que cierra el corazón al amor que se dona hasta la muerte y que lleva
al cinismo y a la desesperanza”.
Estas
situaciones, continuó el Cardenal, “dañan a los niños pequeños al infligirles
una duda existencial profunda sobre el amor. Son un escándalo y un obstáculo
que hace que los más vulnerables no crean en tal amor, y un peso que aplasta y
que puede impedir que se abran al poder sanador del Evangelio”.
En
medio de todo esto, dijo el Purpurado africano, la Iglesia y
el Papa Francisco a la cabeza, intentan combatir la globalización de la
indiferencia y la enseñanza de siempre sobre la familia.
“Por
esta razón el Santo Padre, abierta y vigorosamente, defiende la enseñanza de la
Iglesia sobre la anticoncepción, el aborto, la homosexualidad, las tecnologías reproductivas, la
educación de los niños y muchas otras más”, indicó el Cardenal.
En
el mundo de hoy, continuó el Cardenal Sarah, “la violencia contra los
cristianos no es solo física” como la que sufren los fieles de Medio Oriente a
manos del Estado Islámico, “sino que es también política, ideológica y
cultural”.
“Esta
forma de persecución religiosa es tan o más dañina, pero es más escondida. No
destruye físicamente pero sí lo hace espiritualmente”, precisó.
El
Purpurado dijo luego que actualmente y “en nombre de la ‘tolerancia’ las
enseñanzas de la Iglesia sobre el matrimonio, la sexualidad y la persona humana están siendo
desmanteladas” y criticó la legalización de las uniones del mismo sexo, el
mandato abortivo de la administración Obama y las leyes que permiten el acceso a los baños de acuerdo a la llamada “identidad
de género”.
El
Cardenal se dirigió a los asistentes al Desayuno Nacional de Oración resaltando
que llegó hasta Estados Unidos para “alentarlos a ser proféticos, fieles y
sobre todo, para que recen”.
“Estas
tres sugerencias –prosiguió– hacen presente que la batalla por el alma de
América y el alma del mundo, es básicamente espiritual. Muestran que la batalla
se pelea primeramente con nuestra propia conversión a Dios cada día”.
Es
importante para esa misión, continuó, un importante discernimiento sobre cómo
“en sus vidas, en sus hogares, en sus lugares de trabajo, en su nación, Dios
está siendo erosionado, eclipsado y liquidado”.
Recordando
el título de su libro, el Cardenal concluyó: “al final, es Dios o nada”.
“Dieu
o rien” (Dios o nada) es el nombre del libro en el que aparece la
extensa entrevista realizada por el periodista francés Nicolas Diat al Cardenal
Sarah. Este hombre de prensa también ha escrito un libro sobre Benedicto XVI.
Los
temas del libro son variados y no excluyen algunos polémicos como los abusos
sexuales de algunos miembros del clero y la enérgica y decisiva reacción de Juan Pablo II,
Benedicto XVI y Francisco con su política de tolerancia cero; además de las
grandes preguntas del mundo posmoderno que vive al margen de Dios.
El
Cardenal Sarah fue ordenado sacerdote en 1969 y fue consagrado obispo en 1979,
convirtiéndose en el más joven del mundo.
En
el año 2001 fue convocado a Roma por el Papa
Juan Pablo II para servir como Secretario de la
Evangelización de los Pueblos.
Benedicto
XVI lo eligió como presidente del Pontificio Consejo Cor Unum en el 2010 y en
el año 2014 el Papa Francisco lo nombró Presidente del dicasterio vaticano que
se ocupa de la liturgia.
Fuente:
ACI Prensa