Hay una cosa en
la que no podemos dudar, la fe de este muchacho, de nuestro amigo que ha
trabajado tanto por esta JMJ, lo ha llevado al cielo y él está con Jesús en
este momento mirándonos a todos nosotros
Desde el balcón
por el que en diversas ocasiones salió a saludar San Juan Pablo II en
el Palacio Arzobispal de Cracovia, el Papa Francisco dirigió unas palabras en
su primer encuentro con los jóvenes participantes en la Jornada Mundial de la
Juventud (JMJ).
En sus palabras
improvisadas en italiano, el Santo Padre recordó a Maciej Szymon, el joven
voluntario que falleció de cáncer el pasado 2 de julio, y que diseñó una gran
cantidad de materiales para la JMJ de Cracovia como las imágenes de los santos
patronos y el kit del peregrino.
A partir del
testimonio de “Maciek”, el Papa exhortó a los jóvenes presentes a no tener
miedo porque Dios es grande, a escoger el “camino justo” para llegar
al cielo como lo hizo el fallecido voluntario.
A continuación
las palabras del Pontífice:
Los saludo
cordialmente, Los veo con mucho entusiasmo y alegría. Pero ahora quiero
decirles algo que les entristecerá el corazón. Hacemos silencio.
Algo de uno de
ustedes, Maciej Szymon Ciesla, tenía poco más de 21 años, había estudiado
diseño gráfico y había dejado su trabajo para ser voluntario de la JMJ.
Todos los
diseños de las banderas son suyas, las imágenes de los santos patronos, el kit
del peregrino y muchas otras cosas que adornan la ciudad. En este trabajo ha
reencontrado su fe.
En noviembre le
fue diagnosticado un cáncer. Los médicos no han podido hacer nada, ni siquiera
con la amputación de la pierna. Él quería llegar vivo a la visita del Papa,
tenía un puesto en el tranvía, en el que ahora viajará el Papa. Pero murió
el 2 de julio, la gente está muy tocada porque él ha hecho un gran bien.
Ahora todos en
silencio pensamos en este compañero de camino, que ha trabajado tanto por esta
Jornada. Y todos nosotros en silencio, del corazón, rezamos. Cada uno rece en
su corazón, él está presente entre nosotros.
(Todos rezan en
silencio)
Alguno de
ustedes puede pensar, este Papa nos malogra la noche... pero es la verdad; y
nosotros debemos habituarnos a las cosas buenas y las cosas malas.
La vida es así queridos jóvenes.
Pero hay una
cosa en la que no podemos dudar, la fe de este muchacho, de nuestro amigo que
ha trabajado tanto por esta JMJ, lo ha llevado al cielo y él está con Jesús en
este momento mirándonos a todos nosotros.
Y esto es una
gracia, un aplauso a nuestro compañero (aplausos). También nosotros lo
encontraremos un día. ¡Ah, eras tú! Un placer conocerte, la vida es así, hoy
estamos aquí, mañana estaremos allá.
El problema es
escoger el camino justo como él lo ha hecho. Agradecemos al Señor porque nos da
estos ejemplos de coraje, de jóvenes valientes que nos ayudan a seguir adelante
en la vida.
No tengan
miedo, no tengan miedo que Dios es grande, Dios es bueno y todos nosotros
tenemos algo de bueno dentro.
Ahora me
despido, mañana nos veremos, ustedes hagan su deber que es hacer lio toda la
noche y hagan ver su alegría cristiana, la alegría que el Señor les da de ser
una comunidad que sigue a Jesús
Y ahora les doy
la bendición. Y como de niño hemos aprendido antes de irnos, saludamos a la
Madre, todos saludamos a la Virgen, cada uno en su propio idioma
(Ave María)
Los bendiga
Dios omnipotente, Padre, Hijo y Espíritu Santo. Buenas noches y recen por mí.
La historia de
Maciek
La revista
Ecclesia cita al P. Grzegorz Suchodolski, Secretario General del comité
organizador de la JMJ Cracovia 2016 quien afirma que “Maciek es una de las
personas a las que Dios llamó a través del sufrimiento durante los preparativos
para la Jornada Mundial de la Juventud. No fue el único que tuvo que atravesar
momentos difíciles por razones de salud, pero sí el único cuyo sacrificio fue
completo y total”.
Maciej Szymon
Ciesla era un diseñador de comunicación visual de la Academia de Bellas Artes
de Cracovia. Ganador de premios, con experiencia. Llegó al comité organizador
de la JMJ en septiembre de 2014 respondiendo a un anuncio publicado en su
universidad.
“Comenzó con la
preparación gráfica para el primer retiro: ya en el primer bosquejo hizo algo
maravilloso. Después de la foto nos dimos cuenta de que Maciek era profesional.
Éramos cuatro personas terminando el sitio web y nos estaba costando mucho, así
que le pedimos ayuda a Maciek. Él vino por la tarde, después del trabajo”,
comenta Monika Rybczy?ska, quien trabaja en el área de diseño gráfico del
comité organizador.
Maciek renunció
a su trabajo en diciembre de 2014 y se unió al equipo de diseño gráfico de la
JMJ. No estaba muy comprometido con la Iglesia; de hecho, cuando
llegó estaba muy desanimado en ese sentido. Aun así, quería trabajar allí.
“Una vez me
dijo: ¿Sabes, Monika? Estoy aquí porque quiero creer que todavía hay algo bueno
en la Iglesia”, recuerda ella.
Junto con
Monika comenzó a trabajar en las imágenes para decorar la ciudad. Luego siguió
el kit del peregrino y el diseño de casullas.
Tras
confirmarse su enfermedad y a pedido de su padre, siguió trabajando desde casa.
El cáncer se extendió a los pulmones y sus compañeros en el voluntariado
rezaban mucho por él: ayunaban y oraban diariamente la coronilla de
la Divina Misericordia por su salud.
“Lo que Maciek
le dio al comité organizador, más allá de un trabajo de diseño bellísimo, fue
la confianza de que Dios es más poderoso que cualquier enfermedad o debilidad
humana; Él puede transformar todo eso. Durante su trabajo en el comité volvió a
creer y a confiar en Dios; de esa manera pudo afrontar el sufrimiento y aceptar
la Cruz y se convirtió en un referente para nosotros”, afirma el P.
Suchodolski.
En mayo de este
año publicó en Facebook: “¡Qué rápido cambian la vida y las prioridades! ¡Y qué
sueños tan diferentes tenemos! Algunos sueñan con tener una carrera y fama,
ascender, un trabajo nuevo, riqueza o, incluso, que el mayor evento de este año
en Cracovia sea un éxito…yo, hace 150 días sueño una sola cosa… que me gustaría
vivir, simplemente”.
En junio le
amputaron la pierna y después de mucho batallar, falleció el 2 de julio de
2016.
El funeral se
realizó el 5 de julio en la Iglesia del Santísimos Cuerpo y Sangre de Jesús en
Katowice. Fue enterrado en el Cementerio de la calle Józefowska de esa ciudad.
Su familia pidió
donaciones para el hospital San Lázaro, en vez de coronas y flores.
Fuente: ACI Prensa