El diálogo en Venezuela se
relanzará en enero de 2017
El diálogo político que
se inició en Venezuela hace más de un mes el martes 6 de diciembre
entró a una fase de revisión con miras a un relanzamiento el 13 de enero 2017,
según informó monseñor Claudio María Celli, enviado del Vaticano, a medios locales.
Los acompañantes internacionales del diálogo exhortan a la prudencia a los
voceros del Gobierno y de la oposición.
En esa línea de
‘prudencia’ y de solicitud de “resultados concretos”, se enmarca la carta
‘confidencial’ del 1 de diciembre de 2016, firmada por el cardenal Pietro
Parolin dirigida a los Jefes de la Mesa del Diálogo Nacional Gobierno-Oposición
en Venezuela en nombre del papa Francisco y en conocimiento a Ernesto Samper,
Secretario General de UNASUR, promotor de las conversaciones junto con los
ex mandatarios, José Luis Rodríguez Zapatero, Martín Torrijos Espino.
La carta ha sido objeto
de ásperos debates e interpretada según la percepción de cada bando.
A continuación los
puntos más sobresalientes de la misiva que se pueden verificar en esta versión
digital publicada por el il.sismógrafo.org, blog muy cercano a fuentes
vaticanas.
En primer lugar, a
través de una cita del Papa Francisco (Santa Marta 24.01.2014) se habla de la
visión de la vida de “alzar muros de incomunicación entre personas, hasta la
degeneración del odio” en contraste con la visión cristiana del diálogo que se
“inclina a crear puentes de comprensión, también después de una pelea”.
Así se exponen dos
condiciones para el dialogo eficaz:
a) “La capacidad del reconocimiento mutuo
como personas con dignidad” […]
b) “La voluntad seria de respetar los
eventuales acuerdos alcanzados y su puntual aplicación, sin tergiversaciones o
ulteriores condiciones”.
Además se alerta del
lenguaje agresivo que no favorece ese “mínimo clima de confianza recíproca que
es necesario para un provechoso desarrollo del diálogo, que debe tener
como objeto únicamente el bien común del pueblo”.
La Santa Sede antes de
la última reunión del 6 de diciembre exhortó a superar las “divergencias” de
las partes para perseguir la “responsabilidad de no abandonar la Mesa del
Diálogo por intereses políticos personales, de partido o ideológicos”.
“Los derechos se
respetan, no se negocian”, se puntualiza en la misiva.
En segundo lugar, la
Santa Sede aclara su papel en la Mesa y las condiciones en las que participa en
la misma después de haber recibido las invitaciones tanto por el gobierno como
de la MUD (Mesa de Unidad Democrática – las fuerzas políticas de la oposición
venezolana).
De esta manera, ante la
“dolorosa situación del País, la Santa Sede- consciente de los no pocos ni
leves riesgos” confirma que ha entrado en el diálogo para favorecer una
“solución pacífica y democrática de la crisis”.
“Me parece, además, fundamental,
insistir en que el rol no es de ‘mediación’ sino de ‘facilitación’ o
‘acompañamiento’: esto significa que son las partes interesadas las que
dialogan, llegan a acuerdos y adoptan resoluciones”, escribe el Secretario de
Estado.
La Santa Sede cierra
filas alrededor de la Conferencia Episcopal de Venezuela, en el compromiso de
buscar el diálogo. Asimismo, pide que sea bien clara su posición para todos
para evitar “interpretaciones equivocas”.
En tercer lugar, expresa
dolor y preocupación de frente al que llama Parolin sin merodeos: “Un
inquietante retraso en la adopción de las medidas necesarias para la aplicación
concreta de los acuerdos”.
Parolin manifestó su
preocupación por las “declaraciones” fueras de las mesas de trabajo que “no
favorecen el entendimiento entre las partes”.
En este contexto, La
Santa Sede llamada a mantener un papel de garante insiste en los siguientes
puntos:
1. “[…]implementación urgente de medidas
destinadas a aliviar la grave crisis de abastecimiento de comida y medicinas
que está sufriendo la población. La Iglesia Venezolana […] está dispuesta a
prestar toda la ayuda posible, con los medios a su alcance, para salir de esta
situación de emergencia social”,
2. […] Convivir en Paz, a que sus diferencias
políticas solo tengan una respuesta en el estricto marco constitucional un
camino democrático, pacífico y electoral y la convicción de que “el camino
electoral sea la normal vía democrática para que los pueblos expresen su propia
voluntad” […] las partes concuerden el calendario electoral que permita a los
venezolanos decidir sin dilataciones su futuro;
3. Se tomen las medidas necesarias para
restituir cuanto antes a la Asamblea Nacional el rol previsto en la
Constitución;
4. Se apliquen los instrumentos legales para
acelerar el proceso de liberación de los detenidos.
Al final, se aseguran
las oraciones del papa Francisco para que el pueblo venezolano supere las
rivalidades y evitar cualquier tipo de violencia, al mismo tiempo que el
secretario de estado, Parolin agradece el esfuerzos realizados.
Termina
protesta en el Vaticano por presos venezolanos
Por otro lado, en el
Vaticano se suspendió esta madrugada la protesta pacifica de Lilian
Tintori, Antonieta de López, mujer y mamá respectivamente, del opositor al
gobierno de Venezuela Leopoldo López y Mitzy Capriles, mujer del alcalde
Antonio Ledezma. Las mujeres pedían la liberación de los presos políticos de
Venezuela.
“Hoy, luego de más de 50
horas de protesta frente al Vaticano decimos que parte de nuestras oraciones
fueron escuchadas. Hoy nuestros hermanos de la Unidad se levantaron del diálogo
sin condiciones y nosotras nos levantamos junto a ellos para iniciar una nueva
etapa de lucha…”, se lee en la cuenta Facebook de Tintori.
ARY
WALDIR RAMOS DÍAZ
Fuente: Aleteia