Las autoridades de Libia
confirman el hallazgo
La
Fiscalía General de Libia ha confirmado oficialmente este viernes 6 de octubre,
el hallazgo de los 21 cristianos egipcios degollados en 2015 por los yihadistas
vinculados al Estado Islámico (Daesh) en una zona costera de la ciudad de
Sirte.
Según
los canales de comunicación del fiscal egipcio, los cuerpos fueron encontrados
en una zona costera en las afueras de la ciudad, con las manos atadas a la
espalda y vestidos con los mismos trajes de color naranja que se veían en el
vídeo macabro de los verdugos del momento de su decapitación. También se han
encontrado sus cabezas junto a los cuerpos, y se están llevando a cabo
procedimientos para identificar a las víctimas de la matanza mediante análisis
de ADN.
A
finales de septiembre (véase Fides 29/09/2017) el Procurador general líbico Al
Sadiq al Sour anunció que se había individuado el lugar donde se encuentran
enterrados los restos mortales de los 21 cristianos coptos degollados por los
yihadistas del Estado Islámico (Daesh).
La
identificación del lugar de sepultura de los cuerpos de las víctimas fue
vinculada por el mismo procurador a la detención de un hombre acusado de haber
tomado parte en la masacre, reivindicada por los yihadistas con la publicación
en la red de un macabro vídeo de la decapitación colectiva.
El
Procurador Al-Sadiq al-Sour también dió la noticia de la identificación del
hombre que gravó las escenas y montó el vídeo. La noticia de la posible
recuperación de los cuerpos de los 21 coptos se propagó rápidamente por
todo Egipto, generando gran entusiasmo, especialmente en las comunidades coptas
de la región de Minya, de donde provienen la mayoría de las víctimas de la
masacre.
Pero
en los últimos días (véase Fides 6/10/2017), las familias de los 21 coptos
que fueron asesinados en Libia han dirigido al Ministerio de Relaciones
Exteriores egipcio una solicitud urgente para que confirme el hallazgo de los
restos de sus familiares.
En
el mensaje, publicado por la Agencia Fides, las familias confirmaban que la
noticia del posible hallazgo les había suscitado esperanza y que oraban por que
los restos mortales de sus familiares pudiesen “regresar a Egipto, a su
iglesia, y convertirse en una bendición para todo el país”.
Pero
se lamentaban de que con los días, las autoridades de Libia y Egipto no habían
dado ninguna indicación del hallazgo, mientras en los medios de comunicación de
ambos países habían comenzado a circular miles de suposiciones e indiscreciones
contradictorias, incluidas algunas que negaban todo lo anunciado por el
Procurador líbico
El
vídeo de la decapitación de los 21 coptos fue subido a la red por sitios
yihadistas el 15 de febrero. Apenas una semana después de su decapitación,
el patriarca católico ortodoxo Tawadros II decidió inscribirlos a todos en el
Synaxarium, el libro de los mártires de la Iglesia Copta, estableciendo que su
memoria fuese celebrada el 15 de febrero.
Agencia
Fides
Fuente:
Aleteia