El Papa Francisco respaldó
una propuesta de crear una red que abarque todos los continentes de reflexión
ética en clave teológica
El Papa Francisco. Foto: Daniel Ibáñez / ACI Prensa |
En
un mensaje enviado a los participantes en la III Conferencia Internacional
Catholica Theological Ethics in the World Church que se celebra en Sarajevo,
Bosnia y Herzegovina, del 26 al 29 de julio de 2018, el Santo Padre resaltó “la
necesidad de construir puentes, no muros” en una sociedad que atraviesa grandes
retos con fenómenos como la migración ocasionada por las guerras y las penurias
económicas.
“Sin
renunciar a la prudencia, estamos llamados a reconocer cada signo y movilizar
toda nuestra energía para eliminar los muros de división y construir puentes de
fraternidad en todo el mundo”, afirmó
En
este sentido, apuntó que la cuestión de la ética teológica “puede dar su propia
contribución específica” a la necesidad de construir puentes. “Encuentro incisiva
vuestra propuesta de crear una red entre personas en los diversos continentes
que, con diferentes modalidades y expresiones, puedan dedicarse a la reflexión
ética en una clave teológica en un esfuerzo para encontrar recursos nuevos y
efectivos”.
Francisco
aseguró que “con tales recursos, se pueden llevar a cabo análisis adecuados,
pero, lo que es más importante, se pueden movilizar energías para una praxis
compasiva y atenta a situaciones humanas trágicas, preocupada por acompañarlas
con un cuidado misericordioso”.
“Para
crear una red así, es urgente construir puentes entre vosotros, compartir ideas
y programas, y desarrollar formas de acercamiento. Huelga decir que esto no
significa luchar por la uniformidad de los puntos de vista, sino más bien
buscar con sinceridad y buena voluntad una convergencia de propósitos, con
apertura dialógica y con la discusión de perspectivas diferentes”.
El
Papa animó a los participantes, como expertos en el campo de la ética
teológica, “a apasionaros por este diálogo y a trabajar en red. Este enfoque
puede inspirar análisis que serán aún más perspicaces y atentos a la
complejidad de la realidad humana”.
“Vosotros
mismos aprenderéis cada vez mejor cómo ser fieles a la palabra de Dios que nos
desafía en la historia, y a mostrar solidaridad con el mundo, que no estáis
llamados a juzgar sino, más bien a ofrecerle nuevos caminos, acompañar
itinerarios, restañar heridas y sostener debilidades”, finalizó.
Fuente:
ACI Prensa