“El santo
pueblo de Dios nos mira y espera de nosotros no solo condenas simples y obvias,
sino medidas concretas y efectivas"
![]() |
Inicio del encuentro del Papa con los obispos sobre la protección de menores. Foto: Vatican Media |
El Papa
Francisco inauguró este 21 de febrero el encuentro con los obispos del mundo
sobre la protección de menores que se llevará a cabo en el Vaticano hasta el
próximo 24 de febrero y animó a buscar con valentía “curar las graves heridas
del escándalo de la pedofilia” en la Iglesia.
Después de la
oración matutina en el Aula Nueva del Sínodo, el Santo Padre explicó que “ante
el flagelo del abuso sexual perpetrado por hombres de la Iglesia que han dañado
a los menores” decidió convocar a Patriarcas, Cardenales, Arzobispos, Obispos,
Superiores Religiosos y otros responsables de algunos Dicasterios vaticanos,
para que “juntos escuchemos al Espíritu Santo y con docilidad escuchemos
el clamor de los pequeños que piden justicia”.
De este modo,
el Papa recordó a los 190 participantes del encuentro, “el peso de la
responsabilidad pastoral y eclesial, que nos obliga a discutir juntos, de
manera sinodal, sincera y profunda sobre cómo enfrentar este mal que
aflige a la Iglesia y a la humanidad”.
“El santo
pueblo de Dios nos mira y espera de nosotros no solo condenas simples y obvias,
sino medidas concretas y efectivas", exclamó.
En este
sentido, el Pontífice alentó a comenzar este “camino armado con la fe y el
espíritu de máxima parresía, valentía y concreción” y para ello, los
participantes recibieron un documento preparado por diversas Comisiones y
Conferencias Episcopales, sobre el cual el Papa explicó que son importantes
criterios “líneas guías para ayudar a nuestra reflexión” que son “un punto de
partida” que no quita “la creatividad que debe haber en este encuentro”.
Asimismo, el
Papa Francisco agradeció a la Pontificia Comisión para la protección de
menores, la Congregación para la Doctrina de la Fe y a los miembros del Comité
organizador “por el excelente trabajo desarrollado con gran compromiso para
preparar este encuentro”. “¡Muchas gracias!”, expresó.
Al finalizar,
el Santo Padre pidió al Espíritu Santo “sostenernos en estos días y ayudarnos
a transformar este mal en una oportunidad de conciencia y de
purificación” y a la Virgen María para que los “ilumine para buscar curar
las graves heridas que el escándalo de la pedofilia ha causado, sea en los
pequeños que en los creyentes”, concluyó.
El programa del
encuentro prevé que de jueves a sábado haya tres relaciones cada día, la
primera fue realizada por el Cardenal Luis Antonio Tagle con el
título “El olor de las ovejas. Saber su dolor y curar sus heridas está en el
corazón de la tarea del pastor”. Diariamente también los participantes tendrán
espacio para las preguntas, trabajos en diferentes grupos lingüísticos y
oración por la tarde con el testimonio de una víctima de abusos.
El sábado por
la tarde se llevará a cabo una liturgia penitencial y el domingo por la mañana
una Concelebración Eucarística, ambos eventos serán en la Sala Regia del
Vaticano. Al finalizar la Misa, el Papa Francisco pronunciará su discurso
final.