El
Papa Francisco señaló tres aspectos que caracterizan el seminario como lugar de
formación del futuro sacerdote: “Es una casa de oración, una casa de estudio,
una casa de comunión”
![]() |
| El Papa Francisco. Foto: Daniel Ibáñez / ACI Prensa |
Así
lo señaló durante la audiencia que concedió este lunes 9 de diciembre a la
comunidad del Pontificio Seminario Regional Flaminio Benedicto XV de Bolonia
con motivo del centenario de su fundación.
En
su discurso, el Pontífice recordó a los seminaristas que están llamados a ser
evangelizadores, de regiones, como la de Bolonia, marcadas por la
descristianización. “Aquellos que están más expuestos al viento frío de la
incertidumbre o de la indiferencia religiosa necesitan encontrar en la persona
del sacerdote esa fe fuerte que es como una antorcha en la noche y como una
roca a la que pueden agarrarse”, señaló.
Explicó
que esa fe “se cultiva sobre todo en la relación personal, corazón a corazón,
con la persona de Jesucristo”. Por ese motivo el seminario es, ante todo, la
casa de oración, el lugar “donde el Señor convoca a los suyos en un lugar
apartado para vivir una fuerte experiencia de encuentro y de escucha”.
De
esa manera, “quiere prepararlos para que se conviertan en educadores del pueblo
de Dios en la fe”. “Es necesario, por tanto, dedicar un esfuerzo adecuado a la
formación espiritual”.
En
segundo lugar, el seminario es casa de estudio, y “el estudio es parte de un
itinerario destinado a educar una fe viva y una fe consciente, llamada a
convertirse en la fe del pastor”. “En este camino, el estudio es un instrumento
privilegiado de conocimiento sapiencial y científico, capaz de asegurar sólidos
cimientos a todo el edificio de la formación de los futuros presbíteros”.
La
tercera dimensión del seminario apuntada por el Papa Francisco es la de ser
casa de comunión. Este aspecto, “parte de una base humana de apertura a los
demás, de capacidad de escucha y de diálogo, y está llamada a tomar la forma de
comunión sacerdotal en torno al obispo y bajo su guía”.
“La
caridad pastoral del sacerdote no puede ser creíble si no va precedida y
acompañada de la fraternidad, primero entre los seminaristas y luego entre los
sacerdotes”, subrayó.
Por
último, el Papa Francisco cerró su discurso resumiendo las cuatro actitudes de
cercanía de los sacerdotes diocesanos: “Estar cerca de Dios en la oración”;
“estar cerca del Obispo”; “estar cerca del presbiterio”; y “la cercanía al
pueblo de Dios”.
Fuente:
ACI Prensa






