Palabras
del Papa después del Ángelus
![]() |
| Ángelus 21 Junio 2020 (C) Vatican Media |
Después
de la oración mariana el Papa recordó el Día Mundial de los Refugiados y la
jornada del Padre que se celebra en Argentina y en otros lugares invitando a
orar por ellos.
También
recordó a San Luis Gonzaga “un muchacho lleno de amor a Dios y al prójimo;
murió muy joven, aquí en Roma, porque se ocupó de las víctimas de la peste”,
confiando a su intercesión a todos los jóvenes del mundo.
A
continuación las palabras del Papa después del Ángelus:
Palabras del Papa
Queridos
hermanos y hermanas:
Este
sábado celebraron las Naciones Unidas el Día Mundial de los Refugiados. La
crisis que ha provocado el coronavirus ha puesto en relieve la necesidad de
asegurar la protección necesaria también a las personas refugiadas, para así
garantizar su dignidad y seguridad. Os invito a uniros a mi oración por un
empeño renovado y eficaz de todos en favor de la protección efectiva de cada
ser humano, en particular los que se han visto obligados a huir debido a
situaciones de grave peligro para ellos o sus familias.
Otro
aspecto sobre el que la pandemia nos ha hecho reflexionar es la relación entre
el hombre y el medio ambiente. La cuarentena ha reducido la contaminación y ha
redescubierto la belleza de muchos lugares libres de tráfico y ruido. Ahora,
con la reanudación de las actividades, todos deberíamos ser más responsables de
cuidar la casa común. Aprecio las muchas iniciativas que, en todas partes del
mundo, vienen “desde abajo” y van en esta dirección. Por ejemplo, hoy en Roma
hay una dedicada al río Tíber. ¡Pero hay muchas en otras partes! Que fomenten
una ciudadanía cada vez más consciente de este bien común esencial.
Hoy
en mi patria y en otros lugares se celebra el día dedicado al padre, a los
papás. Aseguro mi cercanía y oración a todos los padres. ¡Todos sabemos que ser
papá no es un trabajo fácil! Por esto recemos por ellos. Recuerdo de manera
especial a nuestros padres que continúan protegiéndonos desde el Cielo.
Os
saludo a todos vosotros, queridos fieles romanos y peregrinos venidos de varias
partes de Italia – ahora empiezan a verse los peregrinos– y, cada vez más,
también de otros países; veo algunos con sus banderas… Os saludo especialmente
a vosotros, jóvenes: hoy recordamos a San Luis Gonzaga, un muchacho lleno de
amor a Dios y al prójimo; murió muy joven, aquí en Roma, porque se ocupó de los
enfermos de la peste. A su intercesión confío a los jóvenes de todo el mundo.
Y
a todos os deseo un buen domingo. Por favor, no os olvidéis de rezar por mí.
¡Buen almuerzo y adiós!
Raquel
Anillo
Fuente:
Zenit






