El informe Libertad religiosa en el mundo, de Ayuda a la Iglesia Necesitada, revela un «paulatino empeoramiento» de la situación en buena parte del planeta
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Foto: EFE/EPA/ Luís Miguel Fonseca |
Los datos de este informe, que se
publica desde 1999, revelan un «paulatino empeoramiento» de la libertad
religiosa en todo el mundo, tal y como ha expuesto en rueda de prensa el
director de Ayuda a la Iglesia Necesitada España, Javier Menéndez. África,
Oriente Medio y Asia son las zonas más afectadas, aunque se ha detectado un
deterioro de este derecho también en algunos países de Latinoamérica,
especialmente Venezuela, Nicaragua y Cuba.
Delitos contra mujeres y niñas
Menéndez ha detallado las
motivaciones que están detrás de estos ataques a la libertad religiosa y ha
explicado que en 43 países los gobiernos autoritarios son los responsables
(afecta a 3.000 millones de personas), en otros 26 es el extremismo islamista (1.242
millones), mientas que en cuatro países se debe a los nacionalismos
étnicos-religiosos (1.642 millones).
Además, en 30 países se han
cometido asesinatos por causa de la fe desde mediados de 2018 hasta mediados
del año pasado. Cambiarse o dejar tu religión conlleva a graves consecuencias
legales y/o sociales en el 21 % de los países del mundo (en 42). El informe
subraya además que los delitos contra niñas y mujeres secuestradas, violadas y
obligadas a cambiar su fe en conversiones forzadas se registraron en un número
creciente de países.
Preocupación por África
En el caso de África, el director
ha destacado un empeoramiento de la situación que afecta a la práctica
totalidad del continente. En el 42 % de los países de África se viola la
libertad religiosa, y en doce la persecución es «extrema». Destacan Libia,
«origen de la exportación de muchos terroristas», Mali, Níger, Nigeria, «uno de
los países mas letales para los cristianos en el mundo», Chad, República del
Congo, Mozambique, o Burkina Faso, donde el 60 % de los territorios son
inaccesibles debido a la presencia de grupos yihadistas y violentos. En Asia,
destacan Indonesia, Maldivas, Myanmar, Sri Lanka, Bangladesh, Pakistán, la
India o Bután. En la mayoría de ellos, es el nacionalismo étnico-religioso el
que desplaza a las religiones minoritarias.
En Europa, Menéndez ha recordado
que el derecho a la objeción de conciencia por motivos religiosos no está
contemplado en la legislación de numerosos países. Y en el caso de España,
aunque ha reconocido que la Constitución recoge la libertad religiosa, ha
advertido de que el actual Gobierno «tiene interés en cambiar la
aconfesionalidad del Estado por un estado laicista, donde la religión se aparta
del foro público o de la enseñanza». En este sentido, se ha referido a la
reforma de la ley educativa «sin consenso civil, sin contar con la comunidad
educativa ni con la jerarquía de la Iglesia» y excluyendo la asignatura de
Religión del curriculum académico.
Impunidad
También ha lamentado el impacto
de la COVID-19 en la práctica religiosa y ha denunciado que el culto se ha
visto afectado por las medidas de control de la enfermedad, en muchas ocasiones
«más restrictivas» que las que se imponían para otro tipo de reuniones
sociales. Ha denunciado asimismo, que se ha producido una estigmatización
religiosa y en diversos países se ha acusado a grupos religiosos minoritarios
de haber sido el origen de la pandemia.
Por su parte la editora del
documento, Marcela Szymanski, ha asegurado que la investigación «muestra la impunidad
que impera, porque nadie hace nada. Todos los autores que violan este derecho
necesitan acabar con la diversidad de pensamiento, conciencia y religión». Y ha
añadido que «el hombre y la mujer que piensa, que busca la verdad y la
transcendencia, es un obstáculo» en el mundo actual.
María Martínez López
Fuente: Alfa y Omega