La joven laica Sandra Sabattini, quien murió a los 23 años y estaba comprometida para casarse, será beatificada el 24 de octubre de 2021
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Sandra Sabattini. Crédito: Comunidad Papa Juan XXIII |
Cuando
murió atropellada estaba comprometida para casarse con Guido Rossi, con quien
soñaba ir a África para iniciar una comunidad que sirviera a los “últimos de
los últimos”.
El P. Oreste Benzi, fundador de
la Comunidad Papa Juan XXIII a la que pertenecía, fue quien promovió su causa
de beatificación con la idea de que se convirtiera en “la primera novia santa”.
La beatificación estaba prevista
inicialmente para el 14 de junio de 2020, pero fue suspendida a causa del
COVID-19, y la nueva fecha fue comunicada recientemente por la Secretaría de
Estado.
De este modo, la celebración será
presidida por el prefecto de la Congregación para las Causas de los Santos,
Cardenal Marcello Semeraro, en la ciudad italiana de Rimini, tierra natal de la
sierva de Dios.
El
Obispo de Rimini, Mons. Francesco Lambiasi, destacó que Sandra Sabattini “es
una figura que puede ser señalada como un icono creíble y atractivo de la
santidad de la puerta de al lado: no son necesarias experiencias excepcionales
de compromiso ascético o de contemplación mística”.
“Todo lo que necesitaba nuestra
querida Sandra era la textura de una vida ordinaria, tejida con una fe viva,
sostenida por una oración intensa y generalizada. Una vida gastada en el feliz
y fiel cumplimiento de su deber, punteada por pequeños gestos de amor llevado
al extremo, en una apasionada amistad con el Cristo pobre y servidor, en un
generoso e incansable servicio en favor de los pobres. Una vez que ella conoció
a Jesús personalmente, ya no pudo evitar amarlo, centrarse en Él, vivir para
Él, en la Iglesia", añadió Mons. Lambiasi.
Breves datos biográficos
Sandra nació el 19 de agosto de
1961 en Riccione y vivió sus primeros años en el municipio de Misano Adriático
en la provincia de Rimini. A los cuatro años, ella y su familia se mudaron a la
casa parroquial de la parroquia de San Girolamo, donde era párroco uno de sus
tíos, el P. Giuseppe Bonini, hermano de su madre.
Con una familia profundamente
católica, Sandra comenzó a escribir un diario personal el 24 de enero de 1972.
Tres años después conoció al P. Oreste Benzi, fundador de la Comunidad Papa
Juan XXIII, que se dedicaba a atender a los “últimos” de la sociedad.
Luego de una experiencia
misionera con el grupo, volvió a casa con un pensamiento claro: “Nos hemos roto
los huesos, pero esa es gente a la que nunca abandonaré”.
Inició la universidad para
estudiar medicina. En su tiempo libre y sus vacaciones se dedicaba a atender a
los enfermos.
Con una vida intensa de oración,
el Rosario diario y la meditación cotidiana de la Palabra de Dios, Sandra
también tenía la costumbre de rezar la primera hora de cada año (de 12 a 1
a.m.) ante el Santísimo Sacramento.
A los 20 años conoció a Guido
Rossi, con quien compartía muchos ideales, como el sueño de ir a África para
servir a los “últimos de los últimos”.
Sin embargo, falleció a los 23
años de edad. El 29 de abril de 1984 iba con Guido a un encuentro de la
Comunidad Papa Juan XXIII. Apenas bajó del auto y a la espera de cruzar la
calle, fue embestida por otro vehículo que iba en sentido contrario. Fue
llevada al Hospital Bellaria de Bologna, donde finalmente falleció el 2 de
mayo.
Milagro
El 19 de julio de 2007 Stefano
Vitali, cuando entonces tenía 41 años, fue curado milagrosamente de una
metástasis bajo la intercesión de Sandra. Toda su historia la relató en el
libro “Vivo por milagro. Así Sandra Sabattini me ha curado”, publicado en
italiano.
En diversas ocasiones, Vitali ha
dado su testimonio de curación. En una transmisión televisiva, indicó que la
sanación “no fue solo física, sino sobre todo espiritual” y añadió que Sandra
le mostró “el camino a seguir para alcanzar la serenidad y realizar mi
vocación”.
“Y si lo hizo conmigo, que soy
una persona testaruda, ¡con más razón podrá hacerlo con los muchos que la
conocerán en el futuro!”, indicó.
Comunidad Juan XXIII
La Asociación Comunidad Papa Juan
XXIII es una asociación internacional de fieles de derecho pontificio.
Fue fundada en 1968 por el P.
Oreste Benzi, y desde entonces busca comprometerse “concretamente y de forma
continua, para luchar contra la marginación y la pobreza”.
La Comunidad Juan XXIII está presente en 40
países con casas-familia, cooperativas sociales y educativas, casas de oración
y servicio para acompañar a quienes enfrentan problemas durante la maternidad,
así como otras iniciativas.
En 2014, el Papa Francisco recibió
en el Vaticano a algunos de sus miembros y alabó el carisma del fundador,
P. Oreste Benzi, porque “su amor por los pequeños y pobres, por los excluidos y
abandonados estaba radicado en el amor a Jesús crucificado, que se hizo pobre y
el último por nosotros”.
El Santo Padre destacó una de las
primeras iniciativas, que consistió en un “encuentro simpático con Cristo” para
los adolescentes, que llevó a los jóvenes a un “encuentro vital y radical con
Él como héroe y amigo”.
Por ello, el Papa invitó a todos
a hacer de la Eucaristía el centro de estas casas-familia y de toda la
actividad social y educativa.
Por Mercedes de la Torre
Fuente: ACI Prensa