Los análisis de sangre del Pontífice han sido «satisfactorios», sigue el tratamiento indicado y va poco a poco retomando el trabajo
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| Foto: CNS/Guglielmo Mangiapane, Reuters |
El Papa está reanudando el trabajo
poco a poco y sigue dando pequeños paseos. El viernes por la tarde celebró la
Eucaristía en la capilla privada, y cenó a última hora «con los que le están
asistiendo durante estos días».
Este último parte añade también
que Francisco está constatando de primera mano la «calidad humana del personal
médico y sanitario que le atiende». «Ha dirigido un pensamiento especial a
todos aquellos que con atención y compasión eligen el rostro del sufrimiento,
involucrándose en una relación personal con los enfermos, sobre todo con los
más frágiles y vulnerables».
Está previsto que este domingo,
11 de julio, el Pontífice rece el ángelus desde la décima planta del hospital
Gemelli.
Viernes 9 de julio
El viernes se avanzaba que la
recuperación del Papa era normal, que comía con regularidad y continuaba con
los tratamientos programados. Además, había reanudado su trabajo, que alternaba
con la lectura y los paseos por el pasillo.
En la tarde del jueves celebró la
Eucaristía en su habitación junto con las personas que lo asisten estos días de
hospitalización.
En las últimas 24 horas el
Pontífice no había presentado fiebre. Como en días anteriores, daba las gracias
«por los numerosos mensajes de afecto y cercanía que recibe a diario y pide que
se siga rezando por él».
Jueves 8 de julio
Los exámenes a los que se fue
sometido el jueves –pruebas rutinarias, pruebas microbiológicas y tomografía de
tórax y abdomen– dieron «negativo». Ese día, el parte médico indicó que a
última hora de la tarde del miércoles, el Pontífice tuvo «unas décimas de
fiebre».
Por otra parte, Francisco saludó
afectuosamente a los pacientes del cercano departamento de oncología pediátrica
y neurología infantil y, según detalló Bruni, dirigía su mirada a todos los que
sufren, expresando su cercanía a los enfermos, especialmente a los más
necesitados de cuidados».
Miércoles 7 de julio
En el parte del miércoles ya se
daba cuenta de que el posoperatorio era «normal y satisfactorio», que estaba
comiendo de forma regular y que la terapia parenteral fue suspendida. También
avanzó que el examen histológico definitivo confirmaba el diagnóstico: una
estenosis diverticular grave con signos de diverticulitis esclerosante.
Entonces, el Pontífice se mostró «conmovido por los numerosos mensajes y el
cariño recibidos en estos días y expresa su gratitud por la cercanía y la
oración».
Martes 6 de julio
El propio Bruni ya manifestó el
martes que el posoperatorio era «normal» y «los controles rutinarios son
buenos». Además, añadió que, tras pasar buena noche, el Papa se había levantado
y caminado, había desayunado y leído algunos periódicos durante la mañana.
Lunes 5 de julio
Las noticias ya eran muy
positivas el lunes, cuando confirmó que se encontraba «en buen estado general,
consciente y respirando por sí mismo» después de la cirugía del domingo.
Durante la misma, que «duró unas tres horas», se le practicó una hemicolectomía
izquierda; es decir, la extirpación de la parte izquierda del colon, debido a
una estenosis diverticular. Si no se producen complicaciones, «se espera una
hospitalización de unos siete días», añadió Bruni.
La operación
La intervención estaba programada
y se llevó a cabo en el Hospital Policlínico Gemelli de Roma. Fue el domingo,
al filo de la medianoche, cuando Bruni explicó en un escueto comunicado que el Papa había reaccionado «bien» a la
intervención, realizada bajo anestesia general.
La noticia de la operación del
Papa se había conocido solo unas horas antes. Poco después del rezo del ángelus, que el propio Francisco había dirigido,
como cada domingo, desde el balcón del Palacio Apostólico de la plaza de San
Pedro, dejaba la residencia Santa Marta para ingresar en el hospital Gemelli.
Está previsto que durante el mes
de julio el Santo Padre mantenga el ángelus de los domingos –en este último ha
anunciado una visita pastoral a Eslovaquia el próximo mes de septiembre–
pero no las audiencias de los miércoles, que se retomarán ya en agosto después
del período vacacional.
Fuente: Alfa y Omega






