Sus hijos son demasiado valiosos para simplemente entregarlos como terreno de experimentación psicosocial y de manipulación
La S de Superman. Crédito: Flickr de Gareth Simpson (CC BY 2.0) |
Esta semana la editorial DC Comics anunció que presentará un
Superman bisexual, que tendrá una relación sentimental con otro
hombre. Ante esto, el conocido sacerdote Fray Nelson Medina lanzó un desafío a
los padres de familia sobre la protección y la educación de sus hijos.
“La idea de sustituir a Clark Kent por otro salvador blanco
heterosexual nos parecía una ocasión desperdiciada”, dijo Tom Taylor, escritor
de la serie “Superman: Son of Kal-El”, en entrevista con The New York
Times.
El cómic mostrará el 9 de noviembre al protagonista de la
historia: el hijo de la versión tradicional de Superman, Clark Kent, cuyo
nombre es Jon Kent, un adolescente de 17 años.
En declaraciones a ACI Prensa este 13 de octubre, Fray Nelson
Medina, sacerdote y doctor en Teología Fundamental, dijo que “es algo positivo
que se vayan definiendo las distintas posturas en la batalla cultural en la que
nos encontramos”.
Esta, continuó, es “una batalla que tiene al centro y como terreno
o destinatarios el corazón y la mente de los niños, en este caso a través de
los cómics que tienen un formato sumamente ágil y visual, y por eso atractivo
para los más jóvenes”.
“La decisión que ha tomado DC Comics de introducir la agenda LGBT
en los cómics hace más claras las cosas. De lo que se trata es de modelar el
corazón de los niños para que se arriesguen a experimentar distintas
sensaciones sexuales o para que tomen una postura de permisividad bajo el
nombre de mente abierta, respecto a la orientación sexual”, alertó.
“Es evidente entonces, que la elección de un personaje como
Superman, sin duda uno de los más exitosos de todos los tiempos, quiere tener
un impacto inmenso en los niños, para conquistarlos desde temprana edad de una
vez y para siempre”.
El sacerdote colombiano precisó también que esta no es la primera
avanzada del lobby LGBT al respecto, pues “ya desde hace varios años la empresa
Disney ha ido introduciendo personajes que son ambiguos en su sexualidad o que
son abiertamente homosexuales, sea como mujeres o como hombres”.
El desafío a los
padres de familia
Ante situaciones como estas, Fray Nelson dijo que los sacerdotes
pueden reaccionar de dos maneras: “Muchos tomarán una acción cómoda e
irresponsable. Esa actitud cómoda suele presentarse como una resignación ante el curso de los
acontecimientos. ‘Ahora es así’. Frase que se dice con cierta
sonrisa. ‘Ahora ya salieron con esto’”.
Sin embargo, una segunda opción es que los padres reconozcan “que
sus hijos son demasiado valiosos para simplemente entregarlos como terreno de experimentación psicosocial
y de manipulación de estos intereses transnacionales”.
Esos padres de familia tendrán entonces que tomar acciones que
Fray Nelson propone en tres puntos:
1.- Saber que
son distintas
“Es evidente que las familias que tienen padres conscientes de lo
que está sucediendo no pueden seguir el curso del entretenimiento de las demás
familias”, resaltó el sacerdote.
“Si para muchas familias es una especie de obligación ir a
Disneylandia, estas familias conscientes del valor de sus hijos sabrán que
tienen que ser distintas”, agregó.
Ese es “el primer punto: Saber que son distintas, que no tienen
que repetir lo que hacen otras familias, que no tienen que ver las mismas
películas ni los mismos programas, ni jugar con los mismos juguetes. Son
familias que tendrán que atreverse a ser distintas”.
2.- Tener una
comunicación más intensa con los hijos
Estas familias “tendrán que hablar, tener un nivel de comunicación
con un nivel más alto y frecuente con sus hijos de lo que es usual hoy”.
“Para muchos padres de familia ha resultado muy cómodo conectar a
sus hijos a la pantalla de un televisor o a un servicio de streaming para
tenerlos tranquilos y distraídos”, lamentó.
Entonces, “hay que reemplazar horas de streaming por otro tipo de
comunicación que incluye otras formas de entretenimiento y también diálogo
frecuente”, entre otras cosas “para explicar a los niños por qué ellos no
tienen que hacer lo que hacen los demás niños”.
3.- Asociarse
con otros padres de familia
“Estos padres de familia responsables buscarán asociarse con otros
padres de familia, quizás de modo virtual con foros o grupos o sitios web, para
aprender estrategias unos de otros y también para facilitar la formación social
de sus hijos porque es evidente que no se les puede, ni se les debe aislar”,
dijo Fray Nelson a ACI Prensa.
Entonces “las tres sugerencias son: arriésguense a ser diferentes,
tengan comunicación más intensa con sus hijos y asóciense”.
Finalmente, el sacerdote colombiano subrayó que “estos tres puntos
tendrán valor si los padres de familia se alimentan del amor mutuo, pero sobre
todo del amor de
Dios y del amor a Dios, lo cual sucede en primer lugar en la oración”.
Por Walter Sánchez Silva
Fuente: ACI Prensa