Ante la triste realidad de tantos matrimonios en dificultades, o ya divididos, “la respuesta debe ser, ante todo, acompañar”
| El Papa Francisco en una imagen de archivo. Foto: Daniel Ibáñez / ACI Prensa |
Así lo afirmó el Papa Francisco
este sábado 6 de noviembre en la audiencia que concedió en el Vaticano a los
miembros de la Asociación “Retrouvaille”, dedicada al acompañamiento pastoral
de los cónyuges en crisis.
El Papa agradeció en su discurso
esta iniciativa “dedicada a los cónyuges que viven una crisis serie en su
relación”. En ese sentido, reflexionó sobre la palabra “crisis”.
Señaló Francisco que la crisis
también es una oportunidad, “oportunidad de dar un salto de calidad en la
relación”. “Sí, una oportunidad dolorosa, pero una oportunidad”.
En cambio, “la crisis te hace
‘bailar’ un poco, te hace escuchar, en ocasiones, cosas incómodas, pero de la
crisis se puede salir, siempre que se salga mejores”. “No tengáis miedo de las
crisis, tened miedo del conflicto”.
La palabra crisis lleva a una
segunda palabra: herida. “Porque las crisis de las personas producen heridas,
yagas en el corazón y en la carne.
Insistió en que “hoy tenemos
mucha necesidad de personas, de cónyuges que sepan dar testimonio de que la
crisis no es una maldición, sino que forma parte del camino, y constituye una
oportunidad”.
“Pero para ser creíbles es
necesario haberlo experimentado. No puede ser un discurso teórico, una
‘exhortación pía’, no sería creíble”, argumentó.
Además de la relación entre las
palabras “crisis” y “herida”, el Santo Padre hizo referencia a otra palabra
clave de la pastoral familiar: “acompañar”.
“Es una de las palabras más
importantes del proceso sinodal sobre la familia celebrado entre 2014 y 2015,
de donde surgió la Exhortación Amoris laetitia”.
Acompañar “hace referencia,
naturalmente, a los pastores, y forma parte de su ministerio, pero implica
también en primera persona a los cónyuges como protagonistas de una comunidad
que acompaña”.
Acompañar, en conclusión, “quiere
decir ‘perder el tiempo’ para estar cerca de las situaciones de crisis. Y con
frecuencia hace falto mucho tiempo, hace falta paciencia, respeto,
disponibilidad. Todo esto es acompañar”.
Por Miguel Pérez Pichel
Fuente: ACI Prensa





