25 – Abril. Lunes. San Marcos, evangelista
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Evangelio según san Marcos 16,
15-20
Y les dijo:
«Id al mundo entero y proclamad el Evangelio a toda la creación. El que crea y sea bautizado se salvará; el que no crea será condenado. A los que crean, les acompañarán estos signos: echarán demonios en mi nombre, hablarán lenguas nuevas, cogerán serpientes en sus manos y, si beben un veneno mortal, no les hará daño. Impondrán las manos a los enfermos, y quedarán sanos».
Después de hablarles, el Señor Jesús fue llevado al cielo y se sentó a la derecha de Dios.
Ellos se fueron a predicar por todas partes, y el Señor cooperaba confirmando la palabra con las señales que los acompañaban.
Comentario
El texto es el final del
Evangelio de San Marcos. Jesús se aparece a los once que, previamente, han
hecho caso omiso de los testimonios de María Magdalena y otros discípulos que
ya lo habían visto resucitado. Tras recriminarles su falta de fe, los envía a
predicar: “El que crea y bautice, se salvará”. La Misión implica la Gracia y el
asentimiento personal. Las dos. El encuentro con Cristo implica toda la vida
del discípulo y se manifiesta en signos concretos de amor, en auténticos
milagros que evidencian la gracia que les alimenta.
Este es el sentido profundo de la
Pascua. Cristo está Vivo, con ellos y en ellos merced a la Gracia que se hará
tangible de manera extraordinaria en el acontecimiento de Pentecostés. Por ello
la Resurrección es no solo de Cristo, sino también nuestra. Es una Fe que llama
a una esperanza, a un sentido nuevo y radical de la vida de los hombres.
Pero, junto al Acontecimiento, la
Pascua implica la Misión. Todo cristiano, por el hecho de serlo, es un apóstol
que predica en su vida la Vida. Este es por antonomasia el carisma de nuestra
Orden de Predicadores: frailes, laicos, monjas y toda la familia de nuestro padre
Santo Domingo. La antorcha que sostiene el perro en sus imágenes es, sin duda,
un signo elocuente de la Luz Pascual que surge en un mundo oscuro y sin
sentidos que merezcan la pena.
Por la fe
(José María Rodríguez Olaizola,
S.I. “Cuando llegas”)
Fuente: Dominicos