"El problema nunca es del niño que está por nacer y las medidas encaminadas a proteger la salud nunca deberían ser las del descarte”
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Imagen referencial. Crédito: Pixabay |
Representantes de las familias numerosas critican que el nuevo
proyecto de ley del aborto impulsado por el Gobierno de España como “una nueva
intromisión” en la vida familiar que intenta “romper los vínculos entre padres
e hijos”.
En
concreto, se critica la nueva propuesta legislativa en lo que respecta a las
menores de edad, que podrán abortar con 16 y 17 años sin conocimiento ni
consentimiento de los padres, así como tendrán acceso gratuito y sin receta a
la llamada píldora del día después.
La Federación Madrileña de Familias Numerosas se pregunta al
respecto: “Si pueden decidir ellas solas ¿dónde queda la patria potestad?,
¿dónde queda la responsabilidad de los padres?”.
La presidenta de esta agrupación de asociaciones de familias
numerosas, María Menéndez, recuerda que con el inicio del curso escolar, es habitual
que, por su número de hijos, lleguen a firmar “decenas de permisos” para
asuntos más o menos triviales como salir en las fotos de grupo de clase.
Sin embargo, subraya en contraposición, que la decisión en un caso
“tan importante como el de abortar”, que implica eliminar la vida de una
persona, “la dejan en manos de una chica de 16 años”.
Menéndez expone otras muchas situaciones en las que los menores
han de estar acompañados o autorizados por sus padres, como viajar solos o
ponerse un piercing.
También otras que directamente tienen prohibidas por ser menores como conducir
un coche, votar, comprar alcohol o tabaco, etc.
La presencia de los padres es considerada como garantía para los
menores, incluso en situaciones que les pueden perjudicar.
Por ejemplo, recuerda Menéndez, “los menores no pueden entrar a
ninguna sala o local de fiesta donde se vendan y consuman bebidas alcohólicas y
tabaco, salvo una excepción”. En caso de que se realicen actuaciones en
directo, “los menores pueden estar si les acompaña su madre, su padre o tutor
legal”.
La Federación Madrileña de Familias Numerosas concluye que “nunca
será legítimo eliminar una vida humana”, ni tampoco “privar de la patria
potestad a los padres respecto de sus hijos menores”, así como “cargar con la
responsabilidad de que la menor decida eliminar la vida que lleva
dentro”.
“El problema nunca es del niño que está por nacer y las medidas
encaminadas a proteger la salud nunca deberían ser las del descarte”, subraya
la federación.
Historia del aborto en España
Desde 1985 hasta 2010 rigió una ley despenalizadora en tres
supuestos, que en la práctica se convirtió en una ley de aborto libre, a través
de la condición de “peligro físico o psicológico” para la madre.
La Ley 2/2010 de 3 de marzo de salud sexual y reproductiva y de la
interrupción voluntaria del embarazo consolidó el aborto libre como un derecho
a petición de la mujer durante las 14 primeras semanas de vida prenatal.
Los únicos requisitos son que se haya informado de las
prestaciones y ayudas públicas de apoyo a la maternidad y que haya transcurrido
el plazo de “al menos tres días” desde que se recibe esta información y la
realización del aborto.
Además, se permite el aborto hasta las 22 semanas en caso de que
“exista grave riesgo para la vida o la salud de la embarazada” y lo dictamine
un médico distinto del que ejecuta el aborto, salvo “en caso de urgencia por
riesgo vital para la gestante”.
El mismo plazo se aplica “siempre que exista riesgo de graves
anomalías en el feto” dictaminado por dos médicos diferentes del que dirija o
practique el aborto.
Igualmente, se
puede acabar con la vida del bebé sin plazo establecido, por tanto, hasta el
momento antes del parto, cuando “se detecten anomalías fetales
incompatibles con la vida” o “una enfermedad extremadamente grave e incurable
en el momento del diagnóstico”.
Pocos meses después de la aprobación de esta ley, el Partido
Popular se alzó en 2011 con la más amplia mayoría absoluta de la democracia en
España. Durante su campaña, se comprometió a derogar la ley de aborto del
Partido Socialista.
Su programa electoral decía: “La maternidad debe estar protegida y
apoyada. Promoveremos una ley de protección de la maternidad con medidas de
apoyo a las mujeres embarazadas, especialmente a las que se encuentren en
situación de dificultad. Impulsaremos redes de apoyo a la maternidad. Cambiaremos el modelo de la actual
regulación sobre el aborto para reforzar la protección del derecho a la vida,
así como de las menores”.
En 2015, poco antes de terminar su mandato, el Partido Popular, en
contra de lo prometido, sólo aumentó ligeramente la protección de las niñas
menores de edad, al requerir el consentimiento paterno.
En agosto de 2022 el Gobierno de Pedro Sánchez, sostenido por una
coalición de solistas y comunistas aprobó un nuevo proyecto de reforma de la
ley del aborto que desprotege aún más el derecho a la vida desde la concepción
y que está pendiente de su tramitación parlamentaria.
Además de eliminar el periodo de reflexión, ha diseñado un sistema
que limita la objeción de conciencia de los médicos y desprotege a las menores
de 16 y 17 años, que podrán abortar a escondidas de sus padres, entre otras
medidas liberalizadoras del aborto.
Se prevé que la ley se apruebe a finales de 2022 tras pasar por el
Congreso y el Senado.
Por Nicolás de Cárdenas
Fuente: ACI Prensa