En Segovia (España) los días 25 de septiembre, festejan a su patrona, Nuestra Señora de la Fuencisla, una antigua imagen del siglo I
Según la tradición esta sería otra imagen creada por san
Lucas que fue traída a la ciudad en el año 71 por san Geroteo, discípulo de san
Pablo, quien fue el primer obispo de la ciudad.
Dominio público
Geroteo la colocó en una cueva abierta, fuera de la ciudad
en un lugar llamado: Peñas Grajeras.
Detrás de estas peñas brotan una multitud de fuentes,
llamadas “fons stillians o fuente que mana”, de allí deriva el nombre de la
imagen.
La invasión musulmana
Durante
la invasión de los musulmanes, el año 714, se ocultó la imagen de la Virgen en
la pequeña iglesia de san Gil, por temor a que fuera profanada.
Allí permaneció durante cuatro siglos, hasta que fue
descubierta en tiempos de Alfonso VII y fue ubicada en el sitio más visible y
público de la ciudad, sobre la puerta de la antigua catedral, frente al
Alcázar.
El milagro de la judía Esther
Pasado un tiempo, durante el reinado de Fernando III, el
Santo, vivía en Segovia una joven judía llamada Esther que había mostrado su
interés por abandonar el judaísmo y convertirse al cristianismo. Al ser
descubierta, fue acusada por algunos judíos de adulterio. Tras presentar
testimonios falsos, fue juzgada y condenada a ser despeñada desde la Peñas
Grajeras. Cuando iba a ser arrojada al vacío, atada de pies y manos, Esther
miró a la Virgen de la Fuencisla, que desde las peñas veía sobre la puerta de
la catedral, y se encomendó a ella. Una fuerza sobrenatural la sujetó
conduciéndola ilesa hasta el suelo. Esther fue bautizada por el obispo Bernardo
con el nombre de María. El pueblo añadió el sobrenombre “del Salto”, para
conmemorar el milagro de la Virgen.
Cofradía Virgen de la Fuencisla
La repercusión de este milagro fue tan grande que Alfonso X
“el Sabio”, lo incluyó en sus “Cantigas”, con el número 107 del códice Las
Cantigas de Nuestra Señora.
Después de lo sucedido Segovia la nombró patrona de la
ciudad, levantando una pequeña ermita en las Peñas Grajeras.
El santuario
Las obras del santuario comenzaron en octubre de 1598 que
duraron hasta septiembre de 1613 fecha en que tuvo su inauguración y traslación
de la imagen al lugar.
Fue coronada canónicamente el 24 de septiembre de 1916 y se
le impuso la Medalla de Oro de la provincia de Segovia en 1957.
El templo consta de una planta de cruz griega, sencilla y
bien proporcionada, con un presbiterio rectangular de dos accesos.
Posee un retablo de Pedro de la Torre en el Altar Mayor así
como una notable reja barroca cerrando el presbiterio, dentro de él destaca el
trono de plata de la Virgen, junto a su pequeño camarín realizado sobre la
misma roca.
Su exterior es sobrio y se accede por una puerta de estilo
renacentista.
Su fiesta
A partir de 1977 se traslada a la Virgen a la catedral con
motivo de la novena que se celebra en su honor todos los años a finales de
septiembre.
Durante esos días miles de personas acuden a la catedral
para venerar a la Virgen, celebrándose la fiesta principal el 25 de septiembre.
En sus viajes entre el santuario y la Catedral va acompañada
por los cadetes de la Academia de Artillería y por la banda de música.
El día que vuelve al santuario va acompañada por los cadetes
hasta la plaza del Azoguejo, donde se canta una salve.
El sepulcro de Esther se encuentra situado en el claustro de
la catedral.
Otra imagen de la Virgen de Fuencisla
Además de la que se venera en su santuario, se conserva un
lienzo del siglo XVIII en el Museo Nacional de Arte de Bolivia, ubicado en la
ciudad de La Paz.
Fuente: “Historia, tradiciones y leyendas de las
imágenes de la Virgen aparecidas en España”, José Muñoz Maldonado; cofradiavirgendelafuencisla.com
María Paola Daud
Fuente: Aleteia





