En el catolicismo, varias montañas se consideran santas, cada una con su propio significado único, apoyándose en narrativas bíblicas o hagiografías
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| Sor Amata CSFN |
Las
montañas ocupan un lugar especial en la mayoría, si no en todas, las
tradiciones religiosas. El catolicismo no es
una excepción. En el catolicismo, varias montañas se consideran sagradas ,
cada una con su propio significado único, apoyándose en narrativas bíblicas o
hagiografías: el Tepeyac, el monte Saint-Michel, Montserrat. Estas montañas sagradas han
sido tradicionalmente consideradas lugares en los que ocurrían encuentros
divinos y, por lo tanto, brindan a los peregrinos la oportunidad de retirarse y
meditar sobre estos misterios. Tres de estas montañas se mencionan
en las Escrituras .
Monte Sinai
El
Monte Sinaí, también conocido como Monte Horeb , es
quizás una de las montañas sagradas más famosas no sólo del catolicismo, sino
de todas las tradiciones abrahámicas. Según la narración bíblica, aquí
es donde Moisés recibió los Diez
Mandamientos . El Libro del Éxodo dice que Dios eligió
esta montaña como el lugar para revelar Su ley divina a Moisés, consolidando
así el pacto entre Dios y el pueblo. La experiencia de la presencia de
Dios en el Monte Sinaí marcó un momento crucial en la historia de las
tradiciones monoteístas abrahámicas y sentó las bases de los
principios morales y éticos que continúan guiándolas.
Monte Tabor
El
monte Tabor es conocido por la Transfiguración de Jesús . Según
los evangelios sinópticos (Mateo, Marcos y Lucas), Jesús llevó a tres de sus
discípulos, Pedro, Santiago y Juan, a la cima del monte Tabor. Allí, en un
momento de excepcional significado escatológico, Jesús se transfiguró ante ellos
(“ Su rostro resplandecía como el sol ”) mientras Moisés y
Elías aparecían junto a él, resumiendo “la Ley y los Profetas” que ahora
se cumplen en y por Jesús . el Mesías. Obviamente Moisés
representa la Ley, mientras que los Profetas están representados por
Elías. La Transfiguración en el Monte Tabor afirmó la divinidad de Jesús,
pero el pasaje también ha sido leído alegóricamente, subrayando la necesidad de
la transfiguración del creyente mediante la acción del Espíritu Santo.
Monte Calvario
El
Monte Calvario, también conocido como Gólgota , es el
lugar de la Crucifixión de Jesús. Situada dentro de la Iglesia del Santo Sepulcro de
Jerusalén , esta montaña sagrada ocupa un lugar excepcional en
el catolicismo. Es en esta colina donde las Escrituras afirman que Jesús
fue crucificado. La crucifixión en el Monte Calvario es uno de los eventos
centrales de la teología cristiana, ya que el sufrimiento de Jesús y su muerte
redentora por crucifixión son los aspectos centrales de los desarrollos
teológicos cristianos relacionados con las doctrinas de la salvación y la
expiación .
Estas
tres montañas son seguramente excepcionales, pero no son las únicas que gozan
de un estatus especial como lugares del espíritu . Estos
son lugares donde se desarrollan narrativas bíblicas que dan forma a la fe y
las creencias de innumerables mujeres y hombres de fe. Para el creyente,
estas montañas son más que hitos históricos: son recordatorios de la relación
permanente entre lo divino y lo humano. Su significado trasciende la
geografía e invita a los creyentes a reflexionar sobre las profundas verdades
espirituales que representan y las verdades espirituales duraderas que se
encuentran tanto en la naturaleza como en la Biblia.
Daniel Esparza
Fuente: Aleteia
