Fue
la curación inexplicable de la chilena Verónica Stoberg que a las 36 semanas de
embarazo se le diagnosticó muerte cerebral
El
beato español Faustino Miguez (1831 -1925) será canonizado el próximo 15
de octubre en El Vaticano. El milagro que ha aprobado la junta médica de la
Congregación para la Causa de los santos, es la curación inexplicable de la
chilena Verónica Stoberg Tejo, a quien con 36 semanas de embarazo se le
diagnosticó muerte cerebral.
Lo
indica detalladamente la web de los obispos en Chile, precisando que el
diagnóstico médico era preeclampsia y Síndrome de HELLP (alteración de la
encima hepática con encefalopatía hipertensiva y hemorragia abdominal masiva
con alta posibilidad de mortalidad) y estado de coma grado 3 en la escala de Glasgow.
Verónica
y su familia, además de la comunidad del colegio Divina Pastora y los
Escolapios, viajarán el próximo 15 de octubre de 2017 a Roma, donde el padre
Faustino será desde entonces llamado San Faustino Miguez.
Cuando
la Sra. Verónica tuvo esta patología, le comunicaron a su esposo y
familiares para contarles que clínicamente ya no había nada más que hacer, que
su vida terminaría en unos días. Paralelamente, la comunidad del colegio Divina
Pastora de La Florida, donde Verónica era catequista y apoderada de dos de sus
cuatro hijos, inició una cadena de oración. Se trataba de una Novena al Padre
Faustino Miguez (por entonces beato en proceso de espera de un milagro para ser
canonizado). La madre superiora, hermana Patricia Olivares, llevó también una
reliquia hasta la sala de Verónica.
Con
el paso de las horas y los días, sin explicación médica, la situación cambió.
La hemorragia cesó y los parámetros analíticos se normalizaron, la gravedad
empezó a disminuir y -lo que fue aún más asombro para la comunidad médica- el
daño cerebral desapareció por completo.
El
14 de septiembre de 2007 se solicita autorización al Arzobispo de Santiago para
introducir el milagro y abrir el proceso en el Tribunal Eclesiástico de la
arquidiócesis de Santiago de Chile, hasta que el 31 de mayo de 2010, la Santa
Sede decreta la validez del milagro. El 10 de diciembre de 2015, el Consejo de
Médicos de El Vaticano declara el milagro, en que se ratifica que la curación
de Verónica Stoberg puede ser atribuida a un milagro por intercesión del Beato
Faustino Miguez. Finalmente, el 22 de diciembre de 2016, fue promulgado por el
papa Francisco el Decreto en el que se aprueba el milagro realizado por el
padre Faustino Miguez en el año 2003.
Fuente:
Zenit