En
las últimas semanas
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Coronavirus (C) Vatican Media |
Con
el fin de colaborar con la situación de emergencia sanitaria actual por el
coronavirus, el Papa Francisco dona otros 35 respiradores a 13 países distintos
en las últimas semanas.
En
una nota difundida por la Limosnería Apostólica, se explica que con esta
ayuda, el Santo Padre “expresa concretamente su cercanía a los países afectados
por la pandemia de Covid-19, especialmente a aquellos con un sistema de salud
más difíciles”.
Igualmente,
la nota informa de que los respiradores pulmonares se distribuyeron, a través
de sus respectivas nunciaturas apostólicas, de la siguiente manera: 4 para
Haití; 2 para la República Dominicana; 2 para Bolivia; 4 para Brasil; 3 para
Colombia; 2 para Ecuador; 3 para Honduras; 3 para México; 4
para Venezuela; 2 para Camerún; 2 para Zimbabwe (a través de la Conferencia
Episcopal local); 2 para Bangladesh; y 2 para Ucrania.
Donaciones del Santo Padre
Esta
constituye otra iniciativa más de Francisco de las muchas realizadas por el
Santo Padre en este tiempo de pandemia. El 23 de abril, día de su santo, san Jorge, Francisco envió dos respiradores
pulmonares y varios dispositivos de protección personal a los hospitales de la
diócesis de Lecce, en la región italiana de Apulia.
Otros
cinco respiradores fueron remitidos a la ciudad de Suceava, en Rumanía, y otros
tres a Madrid, España, país al que ya habían
llegado en marzo otros respiradores donados por el Papa.
Igualmente,
el 18 de abril fue creado el Fondo de
Emergencia de la CEC (Congregación para las Iglesias Orientales) y el Pontífice
envió diez respiradores pulmonares a Siria y otros tres al Hospital San José de
Jerusalén. De este modo, contribuyó al abastecimiento de kits de
diagnóstico para Gaza y para el Hospital de la Sagrada Familia de Belén.
El
Hospital de Bérgamo, una de las ciudades italianas más golpeadas por la pandemia,
recibió también una aportación de 60 mil euros a
principios de abril y a mediados de ese mes fue entregado material sanitario a
las residencias de ancianos de Umbría.
Asimismo,
el Obispo de Roma promovió la creación de un fondo de emergencia en las Obras
Misionales Pontificias, con un presupuesto inicial de 750 mil dólares,
destinado a ayudar a los países de misión
Además,
recientemente, el Papa ha donado 2.500 pruebas de COVID-19 al Ministerio de
Salud de Gaza, a través de la Congregación para las
Iglesias Orientales, ya que en esta zona está siendo difícil conocer el número
de afectados ante la escasez de las mismas.
Larissa
I. López
Fuente:
Zenit