Este proyecto de Ley Orgánica de Modificación de la Ley de Orgánica de Educación (LOMLOE) incluye la exclusión de la asignatura de Religión del programa educativo, entre otros puntos
![]() |
Mons. Luis Argüello, portavoz Conferencia Episcopal Española.
Crédito: Captura de pantalla Youtube canal CEE
|
El
portavoz de la Conferencia Episcopal Española, Mons. Luis Argüello, habló sobre
la acción del Gobierno español en relación con el proyecto de Ley Órgánica de
Modificación de la Ley Orgánica de Educación (LOMLOE) así como la exclusión del
Gobierno de las ayudas de más de 2 mil millones de euros previstos para las
escuelas.
Mons.
Argüello aseguró que estos “son dos asuntos, pero ciertamente están
relacionados” y declaró: “Estamos preocupados, deseamos dialogar, anhelamos un
encuentro, un espacio común en la plaza pública que es de todos”.
Este
proyecto de Ley Orgánica de Modificación de la Ley de Orgánica de Educación
(LOMLOE) o también conocida como Ley Celaá en relación con el nombre de la
Ministra de Educación, Isabel Celaá, comenzó en el Congreso su tramitación
parlamentaria durante la pandemia, a pesar de no obtener consenso, e incluye la
exclusión de la asignatura de Religión del programa educativo, entre otros
puntos.
En
ese sentido, Mons. Argüello destacó que “somos conscientes de que la red
concertada participa en el espacio público y colabora en el espacio público,
forma parte de la red pública de educación en España”, pero aseguró “no
entender muy bien” que se haya aprobado “un criterio del reparto de fondos de
ayuda para la educación en España y que se excluya a una parte que representa
casi un tercio de la red pública en España”.
También
subrayó que “desde los propios datos de los presupuestos del Estado, desde los
propios datos del Ministerio de Educación" se muestra que "el gasto
que supone para las arcas públicas un puesto en la red pública estatal es
bastante más alto del que representa un puesto escolar en la red pública de
iniciativa social (concertada)".
Por
eso denunció que no comprende por qué "en un tiempo de singular crisis se
le someta a un esfuerzo mayor [a la educación concertada] al no recibir estas
ayudas”.
Mons.
Argüello mostró su esperanza en que todavía se pueda revocar esta decisión
“porque lo que se ha hecho es aprobar una propuesta en la comisión especial
aprobada en el Congreso para reconstrucción. Esto tiene que ir al pleno del
Congreso de los Diputados y luego en cada una de las comunidades autónomas ha
de articularse la distribución”.
“Nosotros
esperamos que el en pleno del Congreso de los Diputados este criterio pueda
reformarse y todo nuestro sistema público de educación, el de iniciativa social
y el de iniciativa estatal, reciba las ayudas que se precisen”, insistió.
Ley Celaá
En
relación sobre la reforma de la Ley de Educación, el portavoz de la CEE aseguró
que se encuentra “en el telar”, y manifestó su sorpresa por que se han
“avanzado los trámites legislativos de una ley que pide consenso” en tiempo “de
pandemia, de estado de alarma”
“Nosotros
hacemos permanentemente un llamamiento al pacto escolar, lo hemos hecho
siempre”, aseguró y destacó su preocupación no solo por la enseñanza concertada
sino también por la pública estatal “a la que van montones de familias, muchas
de las familias, por supuesto vinculadas a la Iglesia, que llevan sus hijos a
la red pública estatal”.
Por
eso insistió en que le preocupa “algunos de los criterios que introduce la
nueva ley, como por ejemplo, el considerar que están en el mismo rango de
responsabilidad educativa los padres y el Estado, en una sorprendente propuesta
de coeducación entre el Estado y los padres”.
“Nosotros
creemos que hay una subsidiariedad. Por que el titular, como reconoce por otra
parte el artículo 27 de la Constitución de la educación de los hijos y
singularmente la educación moral y religiosa, son los padres y que el Estado
ayuda, como no podría ser de otra manera, a que algo tan importante en la vida
de una sociedad como es la educación pueda realizarse”, insistió.
Además
habló sobre el criterio de “demanda social” que pretende eliminarse y por el
que la solicitud y la elección de los padres del colegio de los hijos no sería
considerada, sino que sería el Estado el que asignaría el centro escolar, sin
contar con las preferencias de los padres.
“Nos
preocupa que la demanda social, la solicitud de los padres no se tenga en
cuenta, y desde ahí el tratamiento que pudiera darse desde estos dos principios
que les digo a la propia escuela concertada”, precisó.
“Tenemos
una preocupación por el estatus de la educación moral y religiosa en la escuela
reconocida también en nuestra Constitución que se viene desarrollando a
lo largo de todos estos años y que nosotros deseamos que pudiera seguir
haciéndose, mostrando desde aquí el deseo que la Iglesia española, no solos de
los obispos, sino la escuela católica, de todos los que están en ella, los
sindicatos de los profesores que participan en la escuela católica, los padres
y las organizaciones de padres tenemos un deseo vivo de diálogo, de llegar a
acuerdos”, declaró.
Respetando
siempre las distintas perspectivas de la sociedad española, Mons. Argüello
animó a encontrar “un lugar común en el que los derechos de todos puedan ser
reconocidos y respetados”.
“Y
ese deseo de diálogo y de entendimiento el que yo quiero manifestar aquí sin
negar la preocupación por los hechos, la aprobación en el plan de
reconstrucción de lo que hemos comentado y también el texto de la LOMLOE, que
es una ley orgánica de modificación de una ley anterior”, subrayó.
Fuente:
ACI Prensa