Inmaculada Concepción
de la Bienaventurada Virgen María, patrona de España
En aquel tiempo, el ángel Gabriel fue enviado por
Dios a una ciudad de Galilea llamada Nazaret, a una virgen desposada con un
hombre llamado José, de la casa de David; el nombre de la virgen era María.
Ella se turbó grandemente ante estas palabras y
se preguntaba qué saludo era aquel.
Y el ángel se retiró.
PALABRAS DEL SANTO PADRE
Te damos las gracias, Madre Inmaculada,
por recordarnos que, por el amor de Jesucristo,
ya no somos esclavos del pecado,
sino libres, libres de amar, libres de querernos,
de ayudarnos como hermanos, aunque diferentes entre nosotros
―¡Gracias a Dios somos diferentes entre nosotros! ―
Gracias porque, con tu candor,
nos animas a no avergonzarnos del bien, sino del mal;
nos ayudas a alejar de nosotros al maligno,
que nos atrae con el engaño,
arrastrándonos a espirales de muerte;
nos das el dulce recuerdo de que somos hijos de Dios,
Padre de inmensa bondad,
fuente eterna de vida, belleza y amor.
Amén.
SOLEMNIDAD DE LA INMACULADA CONCEPCIÓN DE LA VIRGEN MARÍA ACTO
DE VENERACIÓN A LA INMACULADA EN LA PLAZA DE ESPAÑA 8 de diciembre de 2019






