Un tema que se ha convertido en el punto principal de acción de quienes tienen fe en Cristo y en el cuidado de la Tierra
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La encíclica del Papa Francisco,
Laudato si’ ha traído una verdadera revolución en el cuidado de la Tierra, de
la naturaleza, de la ecología, de nuestro entorno, en suma, de la Casa Común
tanto en la Iglesia católica y, por extensión, en todo la comunidad cristiana
mundial.
Un tema que parecía patrimonio de
grupos llamados “verdes” tanto en la política como en la sociedad por los
grupos ambientalistas, se ha convertido en el punto principal de acción de
quienes tienen fe en Cristo y en el cuidado de la Tierra, como respuesta a la
llamada del Génesis a las criaturas de Dios de “enseñorearse de ella”.
Por supuesto, “enseñorearse” no
es lo mismo que ensañarse, cosa que los seres humanos hemos venido haciendo con
singular despreocupación, en aras del desarrollo industrial, particularmente
desde la segunda mitad del siglo XX hasta hoy.
Tiempo de la Creación
En el Vaticano, las cosas se
mueven a ritmos insospechados. Por lo pronto, el Dicasterio para el Servicio
del Desarrollo Humano Integral invita a los cristianos de todo el mundo a
unirse en la conmemoración por el Tiempo de la Creación 2021, una celebración
anual de oración y acción por la Casa Común.
En el texto de la invitación se
detalla que el Tiempo de la Creación 2021 inicia el 1 de septiembre –en
concordancia con la Jornada Mundial de Oración por el Cuidado de la Creación– y
termina el 4 de octubre, fiesta de San Francisco de Asís, patrono de la
ecología.
Cada año, desde que se instituyó
esta celebración ecuménica de oración y acción por nuestra Casa Común,
inspirada por el Papa Francisco y su llamado a la conversión ecológica, lleva
un lema. Y en esta ocasión es: “¿Una casa para todos? Renovando el Oikos de
Dios”.
¿Qué quiere decir oikos?
Para muchos jóvenes la palabra
“oikos” va directamente ligada a un tipo de yogurt griego, puesto de moda
recientemente por sus cualidades nutritivas. Sin embargo, siendo una palabra
griega sin traducción al español se suele referir a la comunidad humana básica.
En efecto, recibe en griego el
nombre de oîkos (u oîkia), la “casa”, “hacienda” o “familia”. El Dicasterio
para el Servicio del Desarrollo Humano Integral, en su convocatoria le da el
sentido de “hogar”, con lo que “busca reflejar la red integral de relaciones
que sostienen el bienestar de la Tierra”.
La tienda de Abraham
También, cada año la celebración
tiene un símbolo ecuménico. En 2021 es la tienda de Abraham pues ésta
representa el “compromiso de salvaguardar un lugar para todos los que comparten
nuestra Casa Común, tal como hizo Abraham en el Libro del Génesis”, señaló el
Secretario del Dicasterio, el padre Bruno-Marie Duffé.
La inminencia de la próxima
celebración de la Convención de la ONU sobre la Biodiversidad COP15 (octubre
2021) y la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático COP26
(noviembre 2021) hace necesario que los cristianos alcemos la voz y emprendamos
iniciativas que protejan nuestro entorno.
El año pasado, el Papa Francisco
también invitó oficialmente a los fieles a participar en esta temporada anual
“en que los cristianos renuevan en todo el mundo su fe en Dios creador y se
unen de manera especial en la oración y tarea a favor de la Casa Común”.
El significado de la tienda
La tienda de Abraham, además de
su significado ecuménico, durante las semanas de el Tiempo de la Creación, implica,
según la convocatoria, que “los cristianos transformaremos nuestra casa en una
tienda para toda la Creación”.
“Invitamos a colocar la tienda de
Abraham en un jardín local como signo de hospitalidad para los excluidos.
Invitamos a las comunidades a rezar con y por los más vulnerables” de los
lugares donde se asiente, dice la convocatoria de este año.
También, la tienda de Abraham
puede estar presente en las liturgias o en eventos a los largo del Tiempo de la
Creación, como símbolo de la intención de la comunidad cristiana de crear un
lugar en el que todos tengan cabida y todos puedan vivir dignamente.
Oración, sostenibilidad e
incidencia
Los individuos y las comunidades
pueden participar del Tiempo de la Creación a través de la oración, en
encuentros ecuménicos que unan a todos los cristianos para cuidar nuestra Casa
Común.
En proyectos sencillos de
sostenibilidad y de incidencia, entre los que caben proyectos de limpieza a
favor de la Creación y campañas a favor de la justicia climática (por ejemplo:
participando en el movimiento de desinversión de combustibles fósiles).
En la página web
SeasonOfCreation.org/es se ofrecen varios recursos para este fin, como una
guía, el folleto de la celebración; un registro de eventos; artículos y
noticias; logos e imágenes de perfil; materiales para webinars; un kit para la
organización de eventos; recursos de oración y un podcast sobre el Tiempo de la
Creación.
Jaime Septién
Fuente: Aleteia
