Francisco García León es uno de los 127 mártires que fueron beatificados en la diócesis de Córdoba (España) el pasado 16 de octubre.
Francisco García, mártir beatificado en la Diócesis de Córdoba el pasado 16 deoctubre 2021. Crédito: Diócesis de Córdoba. |
Francisco García es el mártir más
joven del grupo de 127 beatificado en la diócesis de Córdoba el pasado 16 de
octubre. Los milicianos le amenazaron con llevarle a la cárcel si no se
deshacía de su escapulario. Él dijo que no le importaba ir a la cárcel.
Falleció dos días después en donde estaba detenido.
Francisco García León es uno de
los 127 mártires que fueron beatificados en la diócesis de Córdoba (España) el
pasado 16 de octubre.
Tenía 15 años y 7 meses cuando
fue asesinado durante la persecución religiosa que tuvo lugar entre los años
1936-1939, en los que se desarrolló la Guerra Civil Española. Es el más joven
del grupo de mártires recientemente beatificado, seguido muy de cerca de otro
joven que ya había cumplido los 16 años.
En los momentos más difíciles del
mes de julio de 1936, cuando comenzó la Guerra Civil Española y se recrudeció
la persecución religiosa, Francisco era “uno de los pocos jóvenes del pueblo
que asistía a Misa a diario y comulgaba. Mostró siempre alegría, educación y
corrección, incluso hasta en estos momentos difíciles y supremos”.
El día 20 de julio de 1936, unos
milicianos llegaron a casa de Francisco para detener a su padre. Una hora más
tarde, los milicianos volvieron para detener a su tío. Fue entonces cuando
vieron que Francisco tenía en el bolsillo del pantalón un escapulario de la
Virgen del Carmen.
Un miliciano le dijo que se
quitara “aquello”, a lo cual él se negó. Le dijeron que si no se lo quitaba lo
llevarían a la cárcel, junto con sus familiares. Don Francisco contestó
resueltamente que así sería, que iría a la cárcel, pero que él no se quitaba el
escapulario.
Francisco fue detenido y murió el
día 22 de julio cuando milicianos marxistas entraron en el cuartel en el que se
encontraba preso y asesinaron a los detenidos.
Por Blanca Ruíz
Fuente: ACI Prensa