Segunda y última parte del texto de la rueda de prensa concedida por el Santo Padre
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El Papa Francisco durante la rueda de prensa en el avió que lo llevó de Japón a Roma. Crédito: Hannah Brockhaus (ACI) |
Caricato, Cristiana
(TV2000 - Italia):
La gente lee que la Santa Sede adquirió inmuebles por cientos de millones de
euros en el corazón de Londres y se queda un poco desconcertada por el uso que
se da a las finanzas vaticanas, en particular cuando se implica al Óbolo de San
Pedro. ¿Usted conocía estas operaciones?
¿Es correcto el uso que se está haciendo del Óbolo de San Pedro? Usted con
frecuencia ha dicho que no se debe hacer dinero con el dinero, con frecuencia
ha denunciado el uso indiscriminado de las finanzas, y en cambio luego vemos
estas operaciones que también implican a la Santa Sede. Esto escandaliza. ¿Cómo ve usted este asunto?
Papa Francisco: Gracias. Primero, de la
buena administración normal sale la suma del Óbolo, ¿y qué hago?, ¿la meto en
el cajón? No, esa es una mala administración. Trato de hacer una inversión y
cuando necesito dar, cuando se evalúan las necesidades de un año, ese capital
no se devalúa, se mantiene o crece un poco. Esa es una buena administración. La
administración del cajón es mala. Se debe buscar una buena administración o una
buena inversión. ¿Claro?
También
una inversión… Entre nosotros se dice ‘una inversión de viudas’, como hacen las
viudas, dos o tres, cinco allá, si cae uno hay otro… Que no se arruinan,
siempre a lo seguro y dentro de la moral.
Si
haces una inversión con el Óbolo de San Pedro en una fábrica de armamento, el
Óbolo entonces no es Óbolo. Si haces una inversión durante años sin tocar el
capital, entonces no funciona. El Óbolo se debe gastar en un año o año y medio,
hasta que llegue otra colecta que se hace mundialmente y esa es una buena
administración, sobre seguro, y sí, se puede también comprara una propiedad,
alquilarla, y luego venderla, pero sobre seguro, con todas las seguridades por
el bien de la gente del Óbolo. Luego pasó aquello que pasó, un escándalo y han
hecho cosas que no parecían limpias.
Pero
la denuncia no vino de fuera. Aquella reforma de la metodología económica que
ya había iniciado Benedicto XVI y fue el Revisor de Cuentas interno quien dijo:
‘Aquí hay algo fe, aquí hay algo que no funciona’. Y vino junto a mí y le dije:
‘¿Está usted seguro?’. ‘Sí. ¿Qué debo hacer?’. ‘Está la justicia vaticana, vaya
donde ellos y haga la denuncia al Promotor de Justicia’. Y en eso quedé
contento porque se ve que la administración vaticana tiene recursos para
aclarar las cosas feas que suceden dentro, como en este caso, que si no es el
caso del inmueble de Londres, porque todavía esto no está claro, pero ahí había
casos de corrupción.
El
promotor ha estudiado el asunto, ha hecho consultas y ha visto que había un
desequilibrio en el balance, y luego me pidió permiso para hacer las
indagaciones. Y le dije: ‘¿Está claro eso?’. ‘Sí, hay una presunta corrupción
en estos casos, debo hacer averiguaciones’. Y le he firmado las autorizaciones.
Fue una investigación en cinco oficinas y, a día de hoy, si bien hay presunción
de inocencia, hay capitales que no han sido bien administrados, también con
corrupción.
Creo
que en menos de un mes iniciaremos los interrogatorios de las cinco personas
que han sido bloqueadas porque había indicios de corrupción. Usted podrá
decirme, ‘¿entonces estos cinco son corruptos?’. No, la presunción de inocencia
es una garantía para todos, un derecho humano, pero hay corrupción y se ve. Con
la investigación se verá si son culpables o no. Es una cosa fea y no es bonito
que sucedan estas cosas en el Vaticano. Pero ha salido a la luz por medio de
mecanismos internos que comienzan a funcionar cuando el Papa Benedicto los puso
en marcha. Por esto, yo doy gracias a Dios, no de que salga la corrupción, sino
de que el sistema de control del Vaticano funcione bien.
Pullella, Philip (Reuters): En las últimas semanas
han surgido preocupaciones por lo que está sucediendo con las finanzas del
Vaticano. Según algunos, hay una guerra interna sobre quién debe controlar el
dinero. La mayor parte de los miembros del consejo de administración del AIF ha
dimitido. El grupo Egmont suspendió al Vaticano de las comunicaciones seguras
después de la redada del 1 de octubre. El director del AIF está todavía
suspendido y aún no hay un revisor general. ¿Qué
puede usted hacer o decir para garantizar a la comunidad internacional
financiera y a los fieles en general que están llamados a contribuir al Óbolo
de San Pedro de que el Vaticano no volverá a ser considerado un país que no es
de fiar y que las reformas no se detendrán y que no se regresará a los hábitos
del pasado?
Papa Francisco: El Vaticano ha dado
pasos adelante en su administración. Por ejemplo, el IOR hoy tiene la
aceptación de todos los bancos y puede actuar como la banca italiana, normal,
cosa que hace un año no podía.
Hay
progresos. Luego, el grupo Egmont: es algo no oficial, internacional, es un
grupo que pertenece al AIF. El control internacional no depende del grupo
Egmont. El grupo Egmont es un grupo privado que tiene su peso. Es un grupo
privado. Moneyval hará la inspección. La ha programado para los primeros meses
del próximo año y la hará. El director del AIF ha sido suspendido porque había
sospecha de mala administración.
El
presidente del AIF hizo fuerza con el grupo Egmont para retomar la
documentación. Y eso la justicia no puede hacerlo. Ante esto, yo hice las
consultas ante la magistratura, a un magistrado italiano de nivel: ‘¿Qué debo
hacer?’. La justicia, ante una acusación de corrupción, es soberana en un país,
es soberana, nadie puede inmiscuirse ahí, nadie puede decirle al grupo Egmont:
‘Vuestros papeles está aquí’. No, deben ser estudiados los papeles de aquello
que parece una mala administración en el sentido de un mal control. Fue la AIF
la que, parece, no controló los delitos de los demás. Su deber era controlar.
Espero que se pruebe que no es así, porque todavía hay presunción de inocencia.
Pero por el momento, el magistrado es soberano porque debe estudiar cómo ha
ido, porque al contrario un país tendría una administración superior que
lideraría la soberanía del país.
El
mandato del presidente del AIF concluía el 19. Lo llamé algunos días antes y él
no se dio cuenta de que lo estaba llamando, y anuncié el 19 dejaba el puesto.
Ya he encontrado al sucesor, un magistrado de altísimo nivel jurídico,
económico, nacional e internacional, y a mi regreso tomará cargo del AIF y
continuará así.
Habría
sido un contrasentido que la Autoridad de control fuese soberana por encima del
Estado. Es una cosa difícil de entender. Pero aquello que ha perturbado un poco
es el grupo Egmont. Es privado. Ayuda mucho, pero no es la autoridad de control
de Moneyval. Moneyval estudiará los números, los procedimientos, cómo ha
actuado el promotor de justicia, estudiará como juez y los jueces han
determinado el asunto.
Sé
que en estos días comenzará, o ya ha comenzado, el interrogatorio de cinco que
han sido suspendidos. No es fácil, pero no debemos ser ingenuos, no debemos ser
esclavos. Alguno me ha dicho que con esto hemos tocado al grupo Egmont, la
gente se asusta, hacemos un poco de terrorismo… Dejémoslo de parte. Nosotros
vamos adelante con la ley, con Moneyval, con el nuevo presidente del AIF. Y el director
ha sido suspendido, quizás fuese inocente. Yo lo quisiera así porque es bueno
que si una persona es inocente y no es culpable. Pero se ha hecho un poco de
ruido con este grupo que no quería que se tocasen los papeles que pertenecían
al grupo.
Pullella, Philip: ¿La gente puede estar tranquila? ¿Qué le puede decir a la gente?
Papa Francisco: Es la primera vez que en
el Vaticano el caso se descubre desde dentro, no desde fuera. Desde fuera,
muchas veces. Pero en esto el Papa Benedicto fue sabio, comenzó un proceso que
ha madurado y ahora las instituciones…, está funcionando el revisor. De verdad,
no quiero ofender al grupo Egmont, que hace mucho bien y ayuda, pero en este
caso la soberanía pertenece al Estado, también la justicia es más soberana que el
poder ejecutivo. No es fácil comprenderlo, pero os pido que comprendáis esta
dificultad.
Juchem, Roland (CIC,
Alemania)
Santo
Padre, en el vuelo de Bangkok a Tokio envió un telegrama a Carrie Lam (jefa
ejecutiva) de Hong Kong. ¿Qué piensa de
la situación ahí, con las manifestaciones y después de las elecciones
municipales? ¿Y cuándo podemos acompañarlo a Pekín?
Papa Francisco: Los telegramas se mandan
a todos los jefes de Estado, es una cosa automática, son hechos de saludo, y
también un modo cortés de pedir permiso para sobrevolar su territorio. Esto no
tiene un significado ni de condena ni de apoyo, es una cosa mecánica que todos
los aviones hacen cuando técnicamente entran. Avisan: ‘Estamos entrando’, y
nosotros lo hacemos con cortesía, saludamos. Esto no tiene algún valor en el
sentido que usted pregunta, solo un valor de cortesía.
Sobre
lo otro que me dice, qué cosa pienso. Pero no es solo Hong Kong, piensa en
Chile, piensa en Francia, la democrática Francia, un año de chalecos amarillos,
piensa en Nicaragua, piensa en los demás países latinoamericanos, Brasil, que
tiene problemas y también cualquier país europeo. Es una cosa general. ¿Qué
hace la Santa Sede con esto? Llama al diálogo, a la paz. Pero no es solo Hong
Kong. Son varias cosas que tienen problemas que yo en este momento no soy capaz
de valorar. Respeto la paz y pido la paz para todos estos países que tienen
problemas. Problemas también hay en España, problemas así. Conviene relativizar
las cosas y llamar al diálogo, a la paz, para que se resuelvan los problemas.
Juchem, Roland: ¿Y Pekín…?
Papa Francisco: Me gustaría ir Pekín,
amo a China.
Alazraki, Valentina
(Televisa - México):
Papa Francisco, América Latina está en llamas. Hemos visto, después de
Venezuela, en Chile las imágenes que no pensábamos de revivir después de
Pinochet. Hemos visto la situación en Bolivia, Nicaragua, otros países.
Violencia en las calles, muertos, heridos, iglesias también violadas. ¿Cuál es su análisis de lo que está
sucediendo en estos países? La Iglesia, y usted personalmente como Papa
latinoamericano, ¿puede hacer algo?,
¿está haciendo algo?
Papa Francisco: Alguien me ha dicho
esto, pero se debe hacer un análisis: “La situación hoy en América Latina se
asemeja a la de 1974-1980”. Chile, Argentina, Uruguay, Brasil, Paraguay con
(Alfredo) Stroessner, creo que Bolivia también. Tenían la Operación Cóndor. En
aquel momento se llamaba, pero una situación así en llamas. Pero no sé si es un
problema que se asemeja al otro. De verdad en este momento no soy capaz de hacer
un análisis total de esto. Es verdad que hay declaraciones no precisamente de
paz. Lo de Chile me asusta, porque Chile sale de un problema de abusos que nos
ha hecho sufrir tanto. Y ahora regresa a un problema de este tipo que no
comprendemos bien. Pero está en llamas, como usted dice. Y se debe buscar el
diálogo y también el análisis. Todavía no he encontrado un análisis bien hecho
sobre la situación en América Latina. Y también los gobiernos débiles, muy
débiles, que no llegan a poner orden y paz. Y por esto ocurre esta situación.
Alazraki, Valentina: Evo Morales ha pedido su
mediación, por ejemplo. Cosas concretas.
Papa Francisco: Sí, cosas concretas.
Venezuela pidió la mediación y la Santa Sede ha estado siempre dispuesta. Hay
una buena relación, nosotros estamos ahí presentes para ayudar cuando es
necesario. Bolivia ha hecho algo de este tipo, aún no sé bien a través de cuál
medio, pero también ha hecho un pedido a las Naciones Unidas que ha enviado sus
delegados, también algunos países de la Unión Europea. Chile no lo sé si ha
hecho algún pedido de mediación internacional. Brasil ciertamente no, pero
también ahí hay problemas. Cosa un poco extraña. No quisiera decir una palabra
de más, porque no estoy en capacidad porque no he estudiado bien, porque
sinceramente no comprendo bien el problema.
Pero
aprovecho su pregunta. Han hablado poco de Tailandia y Tailandia es otra cosa,
diferente de Japón, es otra cultura. Diferente. Una cultura de la trascendencia
y también de belleza, diferente a la belleza de Japón. Una cultura, tanta
pobreza y tanta riqueza espiritual. Pero también hay un problema que lastima el
corazón y que nos hace pensar en Grecia y los demás. Usted es una maestra en
este problema de la explotación. Lo ha estudiado bien y su libro ha hecho tanto
bien. En Tailandia, algunas cosas de Tailandia son duras, son difíciles por
esto.
Pero
está la Tailandia del sur, y está también la bella Tailandia del norte, donde
no he podido ir, la Tailandia tribal, como existe la India del noreste tribal
que tiene otra cultura. He recibido unas veinte personas de esa zona que son
los primeros bautizados, que vinieron a Roma. Una cultura diferente, esa
cultura tribal que en India se conoce bien, pero en Tailandia todavía no se
conoce bien, ¿no?, al norte. Hemos visto que Bangkok es una ciudad modernísima.
Es una ciudad fuerte, grande, pero tiene problemas diferentes a los problemas
de Japón, y tiene riquezas diferentes a las riquezas de Japón.
Pero
los problemas de la explotación he querido subrayarlo. Y le agradezco a usted y
su libro. Y también quisiera agradecer el libro verde de Franca. ¿Dónde está
Giansoldati? Ah, está ahí. Dos mujeres que vienen en el vuelo que han hecho un
libro, cada una, que tocan los problemas de hoy. El problema ecológico, el
problema de la destrucción de la madre tierra, del ambiente. Y el problema de
la explotación humana que usted ha tocado. Se ve que las mujeres trabajan más
que los hombres y son capaces. Gracias. Gracias a ambas por esta contribución,
gracias. Y todavía llevo en el corazón la camisa de Rocío. No la olvido. Y a
todos ustedes gracias. Gracias por hacer las preguntas directas, gracias. Esto
hace bien, siempre hace bien. Recen por mí. Buen almuerzo. Gracias.
Fuente: ACI Prensa