La Audiencia General de este miércoles se llevó a cabo en la Plaza San Pedro del Vaticano
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Papa Francisco en el papamóvil durante la Audiencia General. Foto: Daniel Ibáñez / ACI Prensa |
En la Audiencia General de este
miércoles 25 de mayo, el Papa Francisco advirtió el peligro de que todo sea
vanidad en la vida y el dejarse llevar por las noticias falsas (fake news), las
supersticiones colectivas y las verdades pseudo-científicas que conducen a una
“sociedad del cansancio”.
“No es casualidad que la nuestra
sea la época de las fake news, de las supersticiones colectivas y
las verdades pseudo-científicas. Es curioso en esta cultura del saber,
del conocer todas las cosas y también de la precisión del saber, se difundan
tantas brujerías… que conducen a una vida de supersticiones”, indicó el Santo
Padre.
La Audiencia
General de este miércoles se llevó a cabo en la Plaza San Pedro del Vaticano.
Al comienzo, el Santo Padre
recorrió en el papamóvil los pasillos de la plaza vaticana para saludar y
bendecir a los numerosos fieles presentes de diferentes partes del mundo y fue
acompañado en el vehículo por algunos niños.
Además, fue la primera vez que
los peregrinos públicamente vieron al Papa Francisco usando un bastón.
El Santo Padre continuó con su
serie de catequesis sobre la vejez y reflexionó en esta ocasión en el Libro del
Eclesiastés o Cohélet “otra joya que encontramos en la Biblia” que “deja
desconcertado por su famoso estribillo: Todo es vanidad, Todo es vanidad,
Todo es vanidad, todo es niebla, humo, vacío”, dijo el Papa.
“Sorprende encontrar estas
expresiones, que cuestionan el sentido de la existencia, dentro de la Sagrada
Escritura. En realidad, la oscilación continua de Cohélet entre el sentido y
el sinsentido es la representación irónica de un conocimiento de la vida que
se desprende de la pasión por la justicia, de la que el juicio de Dios es
garante. Y la conclusión del Libro indica el camino para salir de la
prueba: Teme a Dios y guarda sus mandamientos, que eso es ser hombre cabal”,
señaló.
En esta línea, el Papa explicó
que “la vejez puede aprender de la sabiduría irónica de Cohélet el arte
de sacar a la luz el engaño oculto en el delirio de una verdad de la
mente desprovista de afectos por la justicia”.
“¡Los ancianos llenos de
sabiduría y humor hacen mucho bien a los jóvenes! Los salvan de la tentación
de un conocimiento del mundo triste y sin sabiduría”, afirmó.
Sin embargo, el Santo Padre
advirtió el peligro de la “dolorosa desilusión” que causa preguntas como “¿Nuestros
esfuerzos han cambiado el mundo? ¿Alguien quizá es capaz de hacer valer
la diferencia entre lo justo y lo injusto? Parece que todo esto es inútil ¿para
qué hacer tantos esfuerzos?”
“Es una especie de
intuición negativa que puede presentarse en cada etapa de la vida, pero no hay
duda de que la vejez hace casi inevitable el encuentro con el desencanto”,
dijo.
En esta línea, el Papa Francisco
destacó que “si los ancianos, que ya han visto de todo, conservan intacta su
pasión por la justicia, entonces hay esperanza para el amor, y también para
la fe. Y para el mundo contemporáneo se ha vuelto crucial el paso a
través de esta crisis, crisis saludable, porque una cultura que presume
de medir todo y manipular todo termina por producir también una
desmoralización colectiva del sentido, una desmoralización del amor, una
desmoralización también del bien”.
“Para nuestra cultura moderna,
que al conocimiento exacto de las cosas quisiera entregar prácticamente todo,
la aparición de esta nueva razón cínica – que suma conocimiento e
irresponsabilidad – es un contragolpe muy duro”, explicó.
Por ello, el Papa pidió estar
atentos al “conocimiento que nos exime de la moralidad, al principio parece una
fuente de libertad, de energía, pero pronto se convierte en una parálisis del
alma”.
Además, el Santo Padre subrayó
que “Cohélet, con su ironía, ya desenmascara esta tentación fatal de
una omnipotencia del saber -un ‘delirio de omnisciencia’ - que genera una
impotencia de la voluntad”.
En este sentido, el Papa advirtió
el peligro de la “acedia” que es una “enfermedad del alma, que de pronto
descubre la vanidad del conocimiento sin fe y sin moral, la ilusión de la
verdad sin justicia”.
“Esta es una de las tentaciones
de todos, pero también de los ancianos. No es simplemente pereza. No es
simplemente depresión. Más bien, es la rendición al conocimiento del mundo
sin más pasión por la justicia y la acción consecuente”.
De este modo, el Papa lamentó que
“nos hemos convertido verdaderamente en una sociedad del cansancio” porque
“teníamos que producir bienestar generalizado y toleramos un mercado sanitario
científicamente selectivo. Teníamos que poner un límite infranqueable a
la paz, y vemos sucesión de guerras cada vez más despiadadas contra personas
indefensas. La ciencia progresa, naturalmente, y es un bien. Pero la sabiduría
de la vida es otra cosa, y parece estancada”.
Ante esto, el Santo Padre indicó
que “¡Los ancianos llenos de sabiduría y humor hacen mucho bien a los
jóvenes! Los salvan de la tentación de un conocimiento del mundo triste
y sin sabiduría. Y también estos ancianos devuelven a los jóvenes a la
promesa de Jesús: Bienaventurados los que tienen hambre y sed de justicia,
porque ellos serán saciados.
“Serán ellos a sembrar hambre y
sed de justicia en los jóvenes. Ánimo a todos nosotros ancianos, ánimo y hacia
adelante. Nosotros tenemos una misión grande en el mundo. Pero, por favor, no
busquen refugio en esos idealismos un poco… no concretos, no reales, sin
raíces. Digámoslo claramente, en las brujerías de la vida”, concluyó el Papa.
Tiroteo en escuela de Estados
Unidos
Antes de finalizar la Audiencia
General, el Papa Francisco lamentó un tiroteo que ocurrió el 24 de mayo en una
escuela primaria de Texas, Estados Unidos, aseguró sus oraciones por las
víctimas y sus familias y pidió a todos comprometerse en contra del comercio de
armas para que estas tragedias no vuelvan a ocurrir.
“Tengo el corazón roto por la
masacre en la escuela primaria de Texas. Rezo por los niños, por los adultos
asesinados y por sus familias. Es
hora de decir basta al comercio indiscriminado de armas. Comprometámonos
todos. Comprometámonos todos porque estas tragedias no pueden volver a
ocurrir”, pidió el Santo Padre.
María Auxiliadora por la paz en
Ucrania
Además, el Papa Francisco invocó
a la Virgen María Auxiliadora en “manera especial el deseo de paz de Ucrania y
del mundo entero”.
“Que la Madre de Dios nos enseñe
a ser solidarios con los que están sufriendo por la tragedia de la guerra y
obtenga la reconciliación de las naciones”, rezó el Papa.
Solemnidad de la Ascensión 2022
Por último, el Santo Padre
recordó la Solemnidad de la Ascensión del Señor -que la Iglesia Católica
celebra 40 días después del Domingo de Resurrección, este año el 26 de mayo- y
señaló que “Jesucristo regresó a la derecha del Padre, pero no nos ha dejado
solos” ya que “desde el Cielo está cerca de nosotros de una manera nueva,
porque a través del Espíritu Santo vive en nuestros corazones” por lo que
auguró vivir la experiencia de “su presencia en cada momento de nuestra vida”.
Por Mercedes de la Torre
Fuente: ACI Prensa