El manifiesto asegura que una parte fundamental que se debe considerar a la hora de plantearse la denominada Interrupción Legal del Embarazo es que el embrión-feto tiene latido
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COPE |
Más de 500 profesionales
médicos de toda España han firmado el 'Manifiesto de Médicos por el Latido Fetal' tras la
reciente propuesta del Gobierno de Castilla y León de ofrecer a las mujeres
embarazadas que se plantean abortar la posibilidad de escuchar el latido fetal,
con la amenaza pública del Ejecutivo de Pedro Sánchez de tumbar la medida en
caso de que la ley fuese aprobada finalmente.
Un documento que ha sido
promovido por la Fundación+Vida a
través de la
web masvida.eu/manifiesto.
En torno a un centenar de
ginecólogos se encuentra entre los firmantes, entre ellos el reconocido José
Ignacio Sánchez Méndez, quien ha afirmado que “es contrario a la Ley vigente
ocultar o impedir que se muestre cuál es la verdad sobre la que se tiene que
dar el consentimiento antes de ser realizada una Interrupción Legal del
Embarazo”, ha afirmado.
El manifiesto asegura que “una
parte fundamental que se debe considerar a la hora de plantearse la denominada
Interrupción Legal del Embarazo es que el embrión-feto tiene latido y la Ley de
autonomía del Paciente recoge que tienen derecho a conocer, con motivo de
cualquier actuación en el ámbito de la salud, toda la información disponible
sobre la misma; la
información clínica será verdadera y obliga al médico no solo a la correcta
prestación de sus técnicas, sino al cumplimiento de los deberes de
información”, ha subrayado.
Asimismo, el manifiesto se
pronuncia ante las críticas vertidas por la Sociedad Española de Ginecología y Obstetricia sobre
la propuesta del Gobierno de Castilla y León: “Es sorprendente que, desde la
mayoría de los organismos de la Administración, e incluso desde los órganos
directivos de alguna Sociedad Médica, se esté tratando por todos los medios de
ocultar este hecho (el embrión-feto tiene latido y es constatable mediante
ecografía) a las personas que tienen que tienen que tomar la difícil decisión
de si continuar o terminar con su embarazo. Una decisión de gran trascendencia,
irreversible, y para la que deberían, ética y legalmente, disponer de toda la
información”.
El manifiesto concluye
asegurando que “no
se puede confundir a la opinión pública alertando sobre los daños potenciales
que le puede producir a un embrión, en peligro inminente de
ser eliminado, la comprobación mediante una ecografía Doppler de que su corazón
está latiendo”.
Fuente:
Ecclesia