Catequesis pronunciada por el Papa Francisco este miércoles 16 de noviembre sobre el sentido de la desolación, “una oportunidad para tener una relación más hermosa con Dios”
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El Papa Francisco llega a la Plaza de San Pedro. Crédito: Daniel Ibáñez/ACI Prensa |
Queridos hermanos y hermanas,
¡buenos días, bienvenidos!
Retomamos hoy las catequesis
sobre el tema del discernimiento. Hemos visto lo importante que es leer lo que
se mueve dentro de nosotros, para no tomar decisiones apresuradas, en la ola
emocional del momento, solo para arrepentirnos cuando ya es demasiado tarde. Es
decir, leer qué sucede y después tomar las decisiones.
En este sentido, también el
estado espiritual que llamamos desolación, cuando en el corazón todo está
oscuro, está triste, este estado de desolación puede ser ocasión de
crecimiento. De hecho, si no hay un poco de insatisfacción, un poco de tristeza
saludable, una sana capacidad de habitar en la soledad y de estar con nosotros
mismos sin huir, corremos el riesgo de permanecer siempre en la superficie de
las cosas y no tomar nunca contacto con el centro de nuestra existencia.







