Mostrando entradas con la etiqueta Fracaso. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Fracaso. Mostrar todas las entradas

11.10.22

LOS SIETE PECADOS CAPITALES DE INTERNET

Cada red social, de acuerdo a uno de los fundadores de LinkedIn, corresponde a un pecado capital

Aleteia

En una conferencia de 2011, transcrita por el Wall Street Journal y re-publicada recientemente por The Atlantic, uno de los fundadores de LinkedIn, Reid Hoffman, sugirió una teoría que permitiría comprender el éxito o fracaso en las redes sociales: cada red está relacionada, en más de una manera, con un pecado capital. La sugerencia no es tan descabellada: Facebook es vanidad; Netflix es pereza; Tinder es ¿hay que decirlo? Obviamente, lujuria.

La pregunta que se hacía Reid Hoffman es sencilla: ¿por qué las redes que en efecto son exitosas y masivas tienen tan poco (o absolutamente nada) que ver con buenas causas o necesidades absolutamente reales? Según Hoffman, porque no son “suficientemente pecaminosas”. Robinson Meyer, de The Atlantic, describe la posible relación de las redes sociales más exitosas con los siete pecados capitales.

Lujuria: así como en el infierno de Dante, las almas de los lujuriosos permanecen por siempre envueltas en un huracán que no les da reposo, los usuarios de Tinder podrían estar teniendo una experiencia similar: la de deslizar el dedo a la derecha en la aplicación, y nunca conseguir a alguien con quien iniciar una relación en serio.

21.9.22

LO QUE EL PADRE PÍO PUEDE ENSEÑARNOS SOBRE SENTIRSE POCA COSA

Todos queremos ser la mejor versión de nosotros mismos, pero a veces pensamos que es solo cuestión de esforzarse más... ¿y si no puedes?

Dominio público

Como todos ustedes, tengo en mi mente una visión de quién me gustaría ser. La mayoría de las mañanas, mientras los grillos cantan antes del amanecer, salgo por la puerta con mi bicicleta de carretera, guardo algunos artículos de primera necesidad en los bolsillos de mi jersey y ruedo por las calles desiertas y arboladas de la ciudad camino a misa temprana.

Algunos días, la cadencia de los pedales me lleva suave, apacible y sosegado. Otras veces, es más como cazar, buscar, escapar.

Hace unas mañanas, la niebla se levantó de la cancha de fútbol del parque del barrio, la misma cancha de césped donde me he sentado muchas horas viendo a mis hijos gritar y bailar con sus amigos mientras un desafortunado entrenador intentaba organizarlos en un ejercicio adecuado para chutar la pelota.

20.9.22

¿CÓMO EVITAR QUE EL FRACASO ME ROMPA?

Hay una clave tan sencilla como eficaz, la revela el Padre de Schoenstatt español afincado en México Carlos Padilla

Thomas Andre Fure | Shutterstock

Tengo en el alma dormido el deseo de vivir más en plenitud.Pero siento que vivo respondiendo a las expectativas y requerimientos de los demás. Eso me hace vulnerable al fracaso.

Me gustaría tener la libertad de los niños para decir que sí y que no sin medir tanto las consecuencias.

Vivo obsesionado por mi fama, mi bienestar, mi gloria. Es la vanidad del hombre que deambula pidiendo milagros a diestro y siniestro.

Como si nada de lo que vivo fuera un don gratuito, un milagro al que me acostumbro, como el hecho de ver nacer el sol.

25.2.22

EL PODER DEL ESFUERZO

Si sólo busco el éxito fácil e inmediato me toparé de bruces con el fracaso de todos mis sueños

Cameron Prins | Shutterstock

Ganar partidos en el mundo del deporte no es lo único. Conseguir éxito en las empresas que emprendo no es lo fundamental.

Si así fuera viviría frustrado continuamente, porque nadie puede ganar siempre. Y el éxito no siempre me acompaña.

¿Cómo se educa el carácter para vivir con paz tanto en el éxito como en el fracaso? Toni Nadal hablaba sobre su sobrino el tenista Rafael Nadal y la educación de los jóvenes:

“Hemos logrado desdeñar todo lo que exige esfuerzo o que nos incomoda mínimamente. En mi amplia experiencia dentro de la formación tenística he ido comprobando cómo se han acentuado en los jóvenes la frustración, el hastío y el abandono enseguida de algo que les turba o no les sale inmediatamente como desean. Las nuevas generaciones necesitan en una medida cada vez más creciente que los entrenamientos sean divertidos, que las recompensas sean inmediatas y que se les aplauda el más mínimo avance”.


22.12.21

3 INESPERADAS SITUACIONES DONDE SE VIVE EL AMOR

La misericordia solo es posible en la imperfección, la falta en sí misma es generativa

Massimiliano Paolino | Shutterstock

Es la propia dinámica de la vida la que nos enseña que el otro nunca puede convertirse en nuestra propiedad. El otro nunca me pertenece.

Las relaciones a menudo se debilitan y mueren porque ansiosamente tratamos de acaparar, pero el mismo intento de poseer acaba destruyendo todo lo que está a su paso.

Podemos vivir en una relación auténtica solo cuando aceptamos que el otro es un regalo y no una propiedad.

Todo es don

Jesús es el don por excelencia, Él viene a nosotros en su encarnación, pero después vuelve a su Padre.

30.11.21

¿DUDAS QUE PODRÁS VOLVER A EMPEZAR? BUSCA ESTO

En multitud de ocasiones, son las circunstancias excepcionalmente adversas o difíciles las que otorgan al hombre la oportunidad de crecer espiritualmente más allá de sí mismo

Shutterstock

El Adviento comienza con esperanza y alegría. Vienen días de paz, de vida, de gozo. ¿Qué desea el corazón humano? Tener paz, seguridad, justicia. Algo brotará que traerá una nueva vida.

Quiero cambiar el sistema, el mundo que me rodea. Acabar con las injusticias y con toda la inseguridad que me rodea. Quiero vivir en la paz que se me promete.

El primer domingo de Adviento, al encender la primera vela, comienza un tiempo de esperanza.

Ya no dudo del amor de Dios que viene a mi vida. Jesús me habla con esperanza de lo que viene por delante de míSe acerca mi liberación. Viene un tiempo de esperanza.

El corazón se alegra y siento que puedo confiar. Jesús viene a mi vida a cambiar mi corazón.

15.7.21

¿QUÉ TENGO QUE HACER? LA CLAVE PARA ENCONTRAR LA RESPUESTA

¡Cuántas empresas se han hundido en este tiempo de pandemia! ¡Cuántos sueños han fracasado! Todo me da experiencia

ESB Professional | Shutterstock
Me gustaría ser prudente con la prudencia de Dios. Escuchar su voz y saber lo que corresponde hacer y vivir en cada momento. Pero no estoy a la altura que necesito para vivir como Dios quiere. Dice la Biblia:

«Hijo mío, si aceptas mis palabras y conservas mis consejos, prestando oído a la sensatez y prestando atención a la prudencia; si invocas a la inteligencia y llamas a la prudencia; si la procuras como el dinero y la buscas como un tesoro, entonces comprenderás el temor del Señor y alcanzarás el conocimiento de Dios. Porque es el Señor quien da sensatez, de su boca proceden saber e inteligencia. Él atesora acierto para los hombres rectos, es escudo para el de conducta intachable, custodia la senda del deber, la rectitud y los buenos senderos. Entonces comprenderás la justicia y el derecho, la rectitud y toda obra buena».

10.6.21

MEJOR AMAR QUE GANAR (SEA CUAL SEA LA BATALLA)

Algunos matices llenos de sabiduría sobre la victoria y el éxito para enfocar mejor tus prioridades, luchas, expectativas y esperanzas

TinnaPong | Shutterstock
Me asusta pensar que la vida se define sólo en ganar o perder. Gano el amor de los demás, de Dios o lo pierdo todo y me quedo solo.

Gano el tiempo o lo dejo escapar y mi vida se apaga. Gano una oportunidad que me abre puertas o pierdo el tren que pasa ante mi estación, dejándolo ir sin hacer nada.

Gano opciones de ser mejor o pierdo la ilusión y ya no lucho por llegar a las estrellas que se dibujan ante mí.

Pierdo el tiempo de ahora por no poder salir de casa por la pandemia o lo gano haciendo aquellas cosas que de otra forma hubieran sido imposibles.

Gano un partido o lo pierdo, no cabe el empate, sólo puede ganar uno. Gano o pierdo. Parece todo tan sencillo…

29.8.20

HE FRACASADO… PERO DIOS TODO LO PUEDE

Él tiene un plan y discretamente acompaña

Public Domain
Dios es fiel a su promesa. De esa verdad no tengo ninguna duda. Dios es fiel al amor que me ha manifestado desde que me concibió en su seno.

A veces he dudado de su fidelidad, o tal vez más de la mía. En medio de dificultades, o problemas brota siempre la intranquilidad y surgen las dudas.

La promesa suele ser siempre la misma. Dios me la susurró en el corazón cuando lo amé por primera vez, cuando me abrazó y me sostuvo siendo joven y yo creí en Él.

Me dijo que sería feliz a su lado, que nada me faltaría, que los caminos serían fáciles y rectos bajo mis pies.

Me hizo creer en mis capacidades ocultas, en los dones que Él había sembrado como tesoros bajo mi piel y que yo no veía.

6.6.20

PERDER ES TAMBIÉN GANAR

Descubre las pequeñas victorias invisibles que marcan la diferencia

Por LedyX/Shutterstock
Aprender a servir supone aprender a renunciar a mis planes. A mis deseos, a mis caprichos y todo por amor al otro. Todo servicio implica renuncia porque supone servir la vida ajena y no pensar sólo en la propia.

Tiene este tiempo algo de Nazaret. Tal vez no pueda hacer muchas cosas. Sólo quedarme en casa y cuidar a los míos. Suena egoísta. Pero no lo es.

Es un tiempo en el que puedo crecer en profundidad y hondura. Es una oportunidad para cambiar mis categorías. Puedo llegar a ser mejor que antes.

El otro día escuchaba: “Es necesario aprender a perder para ganar”.

Derrotas que enseñan

4.2.20

¿ACTUASTE DE FORMA INCORRECTA Y NO HAY VUELTA ATRÁS?

Reconocer un error y perdonarte es el inicio de algo que puede ser mejor de lo que pudiste imaginar

Juli-cc
El fracaso, la desilusión, el desengaño son parte del camino que recorro. Jesús nunca me prometió éxitos seguros, ni una paz sin tensiones.

Tampoco me dijo que mi vida estaría llena de bendiciones, lejos del mal que temo. No me aseguró que no iba a tropezar nunca. No me habló de logros sin ruptura.

Es cierto que hay temporadas en mi vida en las que no sucede nada especial, todo va sobre ruedas. Alcanzo las cimas soñadas. Logro besar la meta de ciertos logros. Sonrío lleno de felicidad y siento que triunfo. ¡Qué humanos somos!

La vida, como la de Jesús en ocasiones, está llena de momentos de reconocimientos y aplausos. No siempre la victoria es esquiva. Y si es así, ¿por qué me asusta tanto la posible derrota?

24.1.20

¿TUS FRACASOS TE BLOQUEAN O TE IMPULSAN?

La clave está en releer esos eventos a la luz de la presencia de un Dios que reconstruye nuestras frustraciones

Margo Harrison / Shutterstock
La vida es un proceso en el que nos vemos empujados a elegir constantemente entre la seguridad de permanecer en nuestra zona de confort y el riesgo de salir de nosotros mismos.

Casi siempre preferimos permanecer en la zona segura para defendernos del amargo fracaso.

Pues, como ya hemos fracasado tantas veces, intentamos archivar (en el último recodo de nuestra mente) esas experiencias negativas.

Tratamos de olvidar aquellos eventos en los que nuestra imagen se ha roto, aquellos momentos en los que la vida y las personas nos han desilusionado.

El mundo nos parece hostil y las dificultades nos parecen insuperables. Nos gustaría estar solos reflexionando sobre los fragmentos rotos, casi con la ilusión de que mágicamente se pueden volver a unir.

28.11.19

¿HAS DEJADO DE CONFIAR EN TI?

No es ganar o perder sino la actitud que yo tenga en ambos momentos

Shutterstock-I Believe I Can Fly
No sé por qué no sigo luchando cuando parece todo perdido. Dejo de lado el sueño de la victoria. Pinto de gris los colores vivos que me encienden. Olvido las motivaciones, y las risas, y la voz calmada de quien me dice que siga creyendo.

No sé por qué de repente me veo solo en medio de la oscuridad. Sin luces, sin salidas. ¿Cómo seguir soñando? Decía el tenista Rafael Nadal:

Mi enemigo no es la derrota, mi enemigo es el miedo a perder”.

Tengo miedo a perder y me bloqueo. Súbitamente la confianza en mí mismo se esfuma. Y lo que antes parecía fácil se torna imposible. Al menos así lo ve mi mirada pesimista. Comentaba Rafael Nadal después de ganar un partido de tenis tras una remontada épica:

31.10.19

MI HIJO (MI OBRA, MI PROYECTO) ME HA DECEPCIONADO: ¿DIOS SE CONTRADICE?

San Francisco sufría, dudaba, temía cuando veía que aquello que tanto amaba estaba en peligro, y se aferraba a su tesoro… ¿sabes cómo se liberó?

By Marian Fil/Shutterstock
Siempre me conmueve un momento concreto de la vida de san Francisco. Ya es mayor y la obra por él fundada ha crecido mucho. Se retira entonces al monte Alvernia en oración y soledad. Solo León le lleva diariamente comida y lo observa desde lejos. En este momento clave de su vida Jesús le pide que le entregue todo lo que tiene como expresión de su amor profundo y sincero. Francisco cree que se lo ha dado ya todo y así se lo dice:

“Tú sabes bien que no tengo otra cosa que el hábito, la cuerda y los calzones, y aun estas tres cosas son tuyas; ¿qué es lo que puedo, pues, ofrecer o dar a tu majestad? Entonces Dios me dijo: – Busca en tu seno y ofréceme lo que encuentres. Busqué, y hallé una bola de oro, y se la ofrecí a Dios; hice lo mismo por tres veces, pues Dios me lo mandó tres veces; y después me arrodillé tres veces, bendiciendo y dando gracias a Dios, que me había dado alguna cosa que ofrecerle”.

17.10.19

ANTE UN FRACASO, SUSTITUYE LAS QUEJAS Y JUSTIFICACIONES POR ESTA PREGUNTA Y VERÁS

La resiliencia y la autocrítica son el camino para lograr cosas

Shutterstock
A veces me canso y tiro la toalla, o la dejo caer. Me olvido de luchar y le echo la culpa al calor, al lugar, a las personas. Miro a los que están mejor que yo y siento envidia. No miro a los que sufren más o a los que están más solos. Paso por delante preocupado de mis derrotas y sinsabores. Y vivo buscando fuera de mí un culpable, una excusa, para poder justificar mi fracaso. No soy capaz de reconocer con humildad que no he estado a la altura, que no lo he hecho bien, que he fallado.

Decía Toni Nadal al hablar de cómo entrenó a su sobrino, el tenista Rafael Nadal:

Siempre hay que tener la fuerza para poder hacer una bola más, hay que ejercitar la resistencia y contar con la adversidad y poderla superar. No he dejado que Rafa se queje. Cuando me decía es que en el partido hacía mucho calor yo le decía, pues sería en tu medio campo, porque el otro ha ganado. Le preguntaba: tú en esa situación ¿qué más podías haber hecho? Ninguna excusa ni justificación nos ha hecho ganar un partido”.

Educar en la resiliencia no es tan sencillo, pero es el camino. Se pueden perder muchas batallas, pero sigue en pie la lucha por ganar la guerra.

21.9.19

PARA EVITAR FRUSTRARTE CUANDO NO SALEN LAS COSAS, RECUERDA ESTO

Lo que te da la felicidad es la satisfacción personal de que diste lo mejor de ti, cualquier cosa que haces tiene el potencial para hacerte feliz

Rawpixel.com - Shutterstock
Cuando las cosas me salen bien estoy más contento. Cuando no me resultan me cuesta aceptar la contrariedad. No puedo evitarlo. Me gustaría tener siempre la misma actitud alegre en las victorias y en los fracasos. Pero no lo consigo.

Cuando experimento el rechazo, la frustración, el abandono, la pérdida, una tristeza honda se extiende por mi alma cubriendo mi esperanza de oscuridad. Pierdo la alegría súbitamente. En un solo golpe me encuentro triste, como si estuviera dentro de una pesadilla y sólo deseara que llegara el momento de despertar a una realidad más venturosa.

Es cierto que el fracaso, la traición, la difamación, la crítica, me unen más a Jesús en la humillación. Vuelvo a recordar que sólo soy un servidor suyo.

Le sirvo al pie de su cruz, desde lo alto de mi propia cruz. Así de sencillo. Veo claro que no puedo vivir obsesionado con lograr todos los éxitos que deseo. El otro día el tenista Rafael Nadal comentaba después de una victoria:

1.4.19

¿FRACASASTE? ¡AHORA A VENIRSE ARRIBA!

Detrás de cada derrota hay espacio para una nueva oportunidad

PIXABAY
En la vida lo fácil es tropezar. Uno empieza a andar y sin darse cuenta yerra el camino. Un desvío pasado por alto. Un despiste. Alguna elección equivocada. Y ya está. Me confundo. ¿No tengo remedio?

Tal vez por eso me gustan las palabras del hijo pródigo: “Yo me levantaré e iré a mi padre”. Se levantará. Dejará el polvo de la caída. Tomará un nuevo camino.

Me gusta esa actitud valiente. Ponerme de nuevo en camino. Levantarme después de haber caído. Lo fácil es caer y perder la esperanza. Pensar que está todo perdido. Que no puedo volver atrás. Que no puedo seguir adelante.

2.9.17

¿SABÍAS QUE JESÚS TAMBIÉN FRACASÓ?

Aun el peor fracaso tiene sentido si confiamos en los planes de Dios, con nuestras caídas fácilmente Él hará cosas maravillosas

En mi corta vida he experimentado, por gracia de Dios, grandes maravillas y también grandes fracasos, he disfrutado el amor de mi mamá Vero y a mi papá Pedro, mis hermanos y toda mi familia, además de muchos amigos y numerosas familias que me regalan su cariño, un día sí y el otro también. 

21.6.17

VOY FRACASO TRAS FRACASO, ¿CÓMO MANTENER LA PASIÓN Y LA LUCHA?

Yo no soy Dios pero mi debilidad puede ser, en lugar de una barrera, un trampolín hacia Él

Comenta el padre José Kentenich: “Miren, el hombre de hoy no puede soportar, no puede sobrellevar ser simplemente una criatura, no ser Dios. El hombre no puede soportar ser un ser sexuado que necesita del otro sexo para ser complementado. No puede reconocer sus propias fronteras y limitaciones. El hombre no puede soportar el no valerse por sí mismo, el tener que depender de otros”.

23.5.17

ANTE EL ÉXITO Y ANTE EL FRACASO, LA MISMA ACTITUD

Ambos son impostores, por tanto indiferencia

Tal vez la fama y el poder, el éxito y el reconocimiento, mueven con demasiada fuerza el corazón del hombre. No quiero que la fama y el poder sean el objeto de mis sueños.

El otro día leía una reflexión interesante de Pedro Luis Uriarte: “Dejé el banco porque de tanto respirar incienso, la persona se estaba muriendo aplastada por el personaje. El poder es la droga por excelencia, te cristaliza el corazón, te cambia como persona. Después de años de éxitos tenía que parar. Cuando estás a máxima presión tienes poder, todo te ha salido bien, tienes tal seguridad en ti mismo que te conviertes en una máquina que va anulando a la persona”.
¡SÍGUENOS EN NUESTRAS REDES SOCIALES! 
facebook twitter